Escultura realizada por el artista gallego Diego de Giráldez.
En agradecimiento a las facilidades que nos ha dado, queremos mostrar un breve currículum, cronología y opiniones sobre el autor:
Destacan de una manera especial las obras pictóricas de gran detalle y composición genial pertenecientes a
su creación del movimiento “Realismo NAS”
DIEGO DE GIRÁLDEZ UN ARTISTA UNIVERSAL
Destacan de una manera especial las obras pictóricas de gran detalle y composición genial pertenecientes a
su creación del movimiento “Realismo NAS”
María
Pérez 29.04.2019 | 23:04
Manuel Diego de Giráldez, más conocido como
DIEGO DE GIRÁLDEZ, es un escultor, pintor,
dibujante y anatomista, autor de una importante obra de arte, tanto pictórica como
escultórica, que ha nacido en A Cañiza–Pontevedra el 8 de marzo 1956 y vigués
de adopción desde 1964. Si en su montañosa Villa natal creció entre labradores,
pastores y aldeanos, a los que intentaba dibujar con carbones de la lareira
sobre papel de estraza, en su ciudad de adopción vivió la infancia y
adolescencia en el Casco Viejo, entre marinos y marineros a los que inmortalizó
con lápiz, ceras y pastel. Hoy día es uno de los grandes artistas del Realismo
español y mundial contemporáneo que sigue conservando virtudes de aldeano, a los
que admira. Posiblemente sea uno de los mejores artistas que dio España en los
últimos años. En su dilatada y exitosa vida artística ha realizado,
como pintor, más de 400 exposiciones individuales en
importantes galerías de las grandes ciudades y capitales
del mundo; múltiples exposiciones colectivas y su obra está
representada en más de 150 museos de los distintos continentes
(Europa, América, África y Asia), entre ellos el del Vaticano, y en
innumerables colecciones privadas e institucionales. En la faceta
de escultor, su obra pública está esparcida por distintas ciudades de la
Península Ibérica e incluso en palacios como los del Duque de Alba. Este
importante artista tiene un museo en la céntrica Plaza Mayor
de la Villa de A Cañiza, lugar de su nacimiento, donde se erige el museo cuyo
proyecto y primera reparación del
inmueble se realiza en 1997 con el asesoramiento de su amigo Antoní Pixot, Director del Museo de Dalí. Una
vez terminadas las obras de ampliación, iniciadas en 2003, se inauguró en Mayo
de 2007 con la entrada, también, por la Calle Botica. En él se exhibe su
importante colección particular que recorre el más de medio siglo de toda su
vida artística. Giráldez, además, es Hijo Predilecto de su Villa natal, Vigués
Distinguido,…... Cuenta con una amplia bibliografía sobre su persona y obra, ha
escrito y publicado tratados sobre “Anatomía Artística” y “Visión Patológica”, es
autor de la ilustración de varios libros de temáticas diferentes, ha recibido
múltiples distinciones, premios y homenajes a lo largo y ancho de Europa, sobre
todo en España y Portugal.
Diego de Giráldez desde niño estuvo en contacto con las artes, ya que su
padre, marino de profesión, le traía información de museos de distintas partes
del mundo y de muy niño le llevó a visitar el Museo del Prado. Todo ello antes
de su ingreso en la Escuela de Artes y Oficios de Vigo. Con sólo 10 años
comenzó la asistencia y estudios, por libre, en dicha EAO, por consejo de Don
Benjamín, profesor de la Escuela Pública de El Pino, en la zona de El
Calvario-Vigo. El párvulo evidenciaba una temprana vocación por el dibujo y
aunque algunos compañeros se quejaban de que en parte del tiempo de sus
estudios se dedicase a: “está haciendo figuras y borrones en el cuaderno….”, su
profesor, al contrario de llamarle la atención por su inclinación artística, le
aconsejó que alternase las clases de la escuela con la asistencia a las clases
de tarde-noche de la EAO donde le ensenarían dibujo, pintura, moldeado y
escultura. Después de los distintos estudios en Vigo, continuó la formación de
Arte en Cataluña, con escapadas a París, Zurich, Roma, El Cairo,..……, hasta
llegar a ser uno de los más importantes artistas españoles contemporáneos de la
corriente realista e inventor del movimiento artístico “Realismo NAS”.
Desde su estancia en la EAO desarrolló un lenguaje artístico muy singular y
particular, autodidacta. A partir de 1968 sus profesores ya le invitan a formar
parte de las exposiciones colectivas. En 1969, con sólo 13 años, le permiten
matricularse y desde 1975,
cuando realiza su primera exposición
individual en la Galería Van Gogh de Vigo, ya le habían adquirido obra
varios coleccionistas vigueses y de otras zonas de Galicia que visitaban su
estudio. Desde ese momento ha realizado un gran número de exposiciones individuales
en importantes galerías y museos internacionales
Diego de Giráldez es un hombre solitario, noble, sencillo, humilde y
orgulloso de su tierra. Si en lo personal es una persona sencilla y humilde, en
lo artístico es un investigador constante que en 1982 crearía el movimiento “Realismo NAS” (Naturalismo,
Abstracción, Surrealismo). Su diálogo estético y la creación de dicho movimiento
caracterizado por un excelente manejo del color y la luz, unidos a la
persistencia y productividad, hacen de este gallego uno de los grandes
artistas españoles universales, emblemático, cuya pintura es reconocible a
primera vista.
Sobre su obra han escrito distintas
plumas del saber: críticos de arte,
escritores, periodistas, directores de museos,……, entre ellos: Camilo José
Cela, Filgueira Valverde, Fernández del Riego, Álvaro Cunquiero, Carlos
Casares, Ramón Piñeiro, Santiago Amón, Ramón Faraldo, Robert Hughes, Gerardo
Diego, Armesto Faginas, Eugenio Montes, Campoy Alías, de Castro Arines, Camón
Aznar, García-Sabell, Antón Fraguas, Blanco-Amor, Paz Andrade, Francisco de
Pablos, Antón Castro o Costa Clavell,…….
Durante su extensa vida dedicada
al arte han colaborado con el artista, hasta el momento, distintas
instituciones..…… Diputaciones como:
ÁVILA, CIUDAD REAL, LUGO, PONTEVEDRA, BURGOS, GUADALAJARA, SEGOVIA, ORENSE, A CORUÑA, ALBACETE,
ZAMORA, VALLADOLID, CASTELLÓN,
TARRAGONA,………
Ayuntamientos como: VIGO, MADRID, BADAJOZ, BURGOS, SANTANDER,
PUERTOLLANO, A CAÑIZA, MARÍN, ALMERIA,
RIBADAVIA, JEREZ DE LA FRONTERA, CIUDAD REAL, BENAVENTE, CIUDAD RODRIGO,
MONFORTE DE LEMOS, FERROL, TOLEDO, VILLALBA, ÁVILA, ARANDA DE DUERO, OURENSE,
MIRANDA DE EBRO, TORRELAVEGA, ASTORGA, PONFERRADA, PEÑAFIEL, GUADALAJARA,
TORDESILLAS, LUARCA, SEGOVIA, ALCAZAR DE SAN JUAN, PONTEVEDRA, CALAHORRA,
ROQUETAS, CALELLA, TARRAGONA, SABADELL, OLMEDO, MEDINA DEL CAMPO, LINARES, DON
BENITO,……….
Entidades bancarias como: CAIXANOVA, CAJA RURAL PROVINCIAL DE
ORENSE, LA CAIXA, CAJA POSTAL, CAJA DE BADAJOZ,
CAJA DE AHORROS PROVINCIAL DE PONTEVEDRA. CAJA DE BURGOS, CAJA DE
AHORROS DE-JEREZ DE LA FRONTERA, CAJA DE AHORROS Y PENSIONES DE BARCELONA, CAJA
DE AHORROS DE GALICIA, CAJA DE AHORROS Y MONTE DE PIEDAD –SALAMANCA, CAJA DE
AHORROS DE ARAGON Y RIOJA, CAJA DE SORIA, CAJA MADRID, CAJA DE CUENCA, CAIXA
OURENSE, CAJA POSTAL, BANCO DE BILBAO-VIZCAYA, CAIXA GERAL DE DEPOSITOS DE
PORTUGAL, UNICAJA, ………..
Comunidades Autónomas como: GALICIA, CANTABRIA, CASTILLA LEÓN, ………..
Entidades, municipios, cámaras portuguesas y de otras partes del mundo
como: MUNICIPIO DE SETUBAL, MUSEU SEBASTIAO DA GAMA, MAIRIE DE PAU
(Francia), CAMARA MUNICIPAL DE CASTELO BRANCO, MUNICIPIO DE MONTEVIDEO, CAMARA
MUNICIPAL – COIMBRA, CAMARA MUNICIPAL- BRAGA, CAMARA MUNICIPAL- VILARREAL,
CAMARA MUNICIPAL-LEIRIA, CAMARA MUNICIPAL-VIANA DO CASTELO, CAMARA
MUNICIPAL-AVEIRO, CAMARA MUNCIPAL-GUARDA, CÁMERA MUNICIPAL DE LAMEGO, CÁMARA
MUNICIPAL DE MURÇA, .........
Otras entidades como: UNICJA FUNDACIÓN, FUNDACION CAIXA SABADELL,
FUNDACION BANCO SABADELL, CENTRO GALLEGO DE SANTANDER, PORT DE TARRAGONA,
CONSELL COMARCAL DEL TARRAGONÉS, CASA MUSEO DIEGO DE GIRÁLDEZ,………
Países. Estados como: ESPAÑA, PORTUGAL, EGIPTO, BÉLGICA, PERÚ,
ARGENTINA, YUGOSLAVIA, BOLVIA, FILIPINAS, GRECIA, ITALIA, COSTA RICA,
SUDÁFRICA, VATICANO, LUXEMBURGO, URUGUAY, NICARAGUA,………
Breve Cronología
Nace en A Cañiza (Pontevedra) en
1956.
En 1964 se traslada con
su familia a vivir a Vigo. Ciudad en la que habita toda su vida.
En 1966 con poco más de
diez años comienza su formación artística, empieza a asistir por libre, puesto
que no tiene edad para matricularse, a la Escuela
de Artes y Oficios de Vigo.
En 1967 sigue sus estudios
artísticos en la EAO de Vigo.
En 1968 sus profesores de la
EAO le seleccionan para participar por libre en su primera exposición colectiva, realizada en esa Escuela de Artes y
Oficios de Vigo.
En 1969 cumple la edad
para poder matricularse en la Escuela de Artes y Oficios, escuela en la que
permaneció hasta su traslado a Cataluña (1976), y lo vuelven a presentar en la
exposición colectiva de fin de curso, de dicha Escuela de Artes y Oficios de
Vigo.
En 1971 sus profesores
le presentan en algunas exposiciones colectivas, entre otros lugares, en la
propia Escuela de Artes y Oficios de Vigo. Recibe distintos premios en
concursos de dibujo y pintura.
En 1972, 73 y 74 le siguen
llevando a distintas exposiciones colectivas y se presenta en una pequeña muestra individual en una sala
de arte dirigida por el Sr. Gamero, que había en las Galerías de la Plaza de América
en las Traviesas-Vigo.
En 1975 realiza su, catalogada, primera/ importante exposición individual en la Sala Van Gogh de Vigo.
En esos años, por Vigo y Pontevedra, se le ve frecuentemente con artistas
e intelectuales de la época: con Álvaro Cunqueiro, con Filgueira Valverde, o
con Carlos Casares, Paz Andrade, Francisco de Pablos, Otero Abeledo “Laxeiro”,
Ángel Sevillano, Enrique Gómez, Juan Otero “Eiravella”, Colmeiro Guimarás,
Urbano Lugrís, Mario Granell, ..…. Así como debido a su gran interés por la
medicina y la anatomía hace que frecuente la gran amistad que le une con
algunos de sus admiradores artísticos, los doctores: Nicolás Peña, Abellás,
Ferreño, Araujo, Soneira,……., con los que se ve en sus clínicas, domicilios o
en su estudio.
En 1976 sus
excepcionales actitudes artísticas van a llevarlo a seguir su formación y
estudios trasladándose a Cataluña, estudia en Olot, Gerona y Barcelona. Monta
estudio en Gerona y desde ahí viaja exponiendo por importantes
galerías de toda la Península Ibérica, también a París y otras partes de
Francia, Italia/Roma, El Vaticano, Inglaterra/Londres, Suiza/Zurich, Egipto/ El
Cairo, Portugal/Lisboa y Oporto…...
En 1977 Conoce a importantes artistas, críticos y
personalidades del mundo de la cultura en Cataluña: Antoní Pixot, Salvador
Dalí, Gala, Xavier Cugat, Buxó, Víctor Gay, Vicent Corominas, Lorenzo de
Diego, Antoní Tápies, … Además de ser invitado al domicilio de Antoní Pixot, en
una cala de Cadaqués, frecuentaba, también, distintas tertulias: Una en un piso
de la carrer de Minali, Gerona, donde se reunían destacados artistas e
intelectuales -pintores, escultores, literatos, periodistas,……-, de la zona,
etc.
En 1977 /1978. Sigue ampliando estudios compaginándolos con su otra gran pasión e interés, la medicina
y la anatomía, y hace amistad con doctores con los que se reúne con cierta
frecuencia: Dr. Arnaud,…, en Barcelona y otros especialistas en Gerona o
médicos de las Fuerzas Armadas, etc.
En 1979, a su regreso a Vigo –ciudad que nunca abandonó y en la que siempre tuvo su domiciliación y a la
que vuelve cada vez que el trabajo y los estudios se lo permiten- realiza distintas exposiciones por Galicia
y continúa con sus pinturas realistas al tiempo que realiza experimentos en el
campo de la abstracción, el naturalismo y el surrealismo sin abandonar el todo,
que es el realismo.
En 1980 fue seleccionado para representar a Galicia en la exposición
“Maestros del Realismo Español de la Vanguardia”, junto a Antonio López, Eduardo Naranjo, Cristóbal
Toral, Francisco y Julio López Hernández, Carmen
Laffón, ........ Como dijo en su intervención el crítico y
catedrático de Historia del Arte, Francisco Calvo Serraller: "El realismo
del siglo XX es un arte no sólo afín a la vanguardia, sino muchas veces
expresión de la misma vanguardia". "El realismo es esencialmente
moderno porque vive de la luz y del tiempo". Y máxime el
“Realismo” de Diego de Giráldez.
En 1981 Vuelve temporalmente a Cataluña, ocupando su estudio de Gerona que
compagina con el de Vigo, donde conserva relación expositiva con
la ciudad gerundense.
En 1982 crea y registra el Movimiento artístico “Realismo NAS”. Cuya primera obra se puede catalogar “El
Cristo Hombre”. Cuadro terminado en los primeros meses de ese mismo
año.
A partir de este año, Diego de
Giráldez, fue invitado a
formar parte de innumerables jurados a lo largo y ancho de
España y Portugal, para otorgar distintos e importantes premios de pintura.
En 1984, y hasta 1986, alterna Galicia (Vigo), Cataluña y Portugal. En
el país vecino, con el Dr. Antonio P. Lamela -de la
Universidad de Lisboa-, Diego de
Giráldez y Valentín Paz Andrade realizan distintos actos (A
nossa lingua floresce em Portugal. Sempre en Galiza Castelao,…..) por
tierras portuguesas y gallegas sobre la figura de Castelao en: Lisboa, Vilanova
de Gaía, Caminha, Viana do Castelo, Santiago de Compostela, Redondela, Vilanova
de Cerveira,….. En la presentación del acto de Vilanova de Cerveira, presidido
por el Ministro da Cultura de Portugal y el Presidente de la Cámara, el Doutor
Lamela presenta al pintor como: "O meu amigo Diego de Giráldez, un
artista invulgar e excepcional......” . También presidieron el acto de
la colocación de la primera piedra del monumento a Castelao, en la Praça da
Galiza de Viana do Castelo. La prensa decía: “……foi colocada a primeira
pedra do monumento a Castelao, procedendo a colocaçao da pedra por Valentín Paz
Andrade, …..”
Otro acto importante, entre los muchos que realizaron en esos dos años, fue
la “Comissão Galega do Acordo Ortográfico da Língua Portuguesa” donde
estuvo Diego de Giráldez acompañando a Valentín Paz Andrade, al
Doutor Antonio P. Lamela y al Ministro de Cultura portugués, entre otros.
En 1986, a finales, regresa definitivamente a Vigo a
su casa, que nunca abandonó, de la calle Real nº 31, en la que
dedica el primer piso a estudio, compartiéndolo con el de la calle del
Príncipe. Esta histórica casa de la calle Real 31 acogió en el Trienio
Liberal al Gobierno Político de la Provincia de Vigo –entre 1820 y 1823-,
posteriormente fue domicilio y estudio de este pintor y actualmente es el
edificio de los Registros de la Propiedad.
En 1987 acompaña a
distintas personalidades para inaugurar el “Monumento a Castelao” en
Redondela. Escultura que se realiza por subscrición popular y que fue
inaugurada en mayo de 1987, pocos días antes del fallecimiento de D. Valentín
Paz Andrade.
A primeros de 1989 viaja a Cataluña y acompañado de Antoní Pixot visitan a Salvador
Dalí en Torre Galatea,
siendo esta la última vez que se ven.
En 1990 realiza la inauguración, con la 1ª exposición que se hace en el
Museo Municipal de Lalín “Ramón María Aller”. Acto realizado con obras de gran tamaño.
En 1991 realiza la inauguración, con la 1ª exposición que se hace en A Casa
das Artes e da Historia de Vigo. Acto realizado con una importante exposición/muestra antológica sobre su
pintura y con la colaboración de La
Caixa.
El 21 de julio de 1996 fallece “Laxeiro” y Diego de Giráldez se queda con los dos estudios, une su estudio de la calle del
Príncipe al que fuera del pintor lalinense. Estudio que alternó con el
de la calle Real hasta 1999, desde ese año viene
utilizando el de la calle de Príncipe hasta la fecha. Además cambia su domicilio para un piso que
posee en el Paseo Peatonal del Calvario,
Calle Urzaiz, donde sigue viviendo en la actualidad.
En 1997, comienza el proyecto
y la primera reparación del inmueble que acogería la Casa-Museo Diego de Giráldez
en la Plaza Mayor de su Villa natal.
En 1998, es seleccionado como uno de los dos pintores que representarán a
España en la “Expo Universal 98” de Lisboa.”
En
Mayo de 1998 se reúne y comenta el tema
de la Casa-Museo Diego de Giráldez con Antoní Pixot, Director del Museo de
Dalí, y luego continúa la obra con
mayor impulso.
En 1999 traslada, definitivamente, su estudio de la Calle Real (al ser
vendida la casa para que la ocupen los Registros de la propiedad) al de la
Calle del Príncipe, también en Vigo. Y su domicilio lo cambia para la calle Urzáiz en el Paseo Peatonal de El Calvario.
En
Abril de 1999 abre la Casa-Museo para
coleccionistas que estaban interesados en la visita a la exposición de su
colección privada.
En Septiembre de 1999 acompaña a José Manuel
Barros González, alcalde de O Porriño, para colocar la placa y celebrar la
conmemoración del centenario de la Capela do Cristo da Agonía donada
por D. Severiano Ramilo Nieves el 17 de Septiembre de 1899 en memoria de las
virtudes de su esposa Doña Prudencia Diz Fortes.
En 2001 realiza la ilustración del libro/novela corta “Sueños
e Historias de Breogán”.
En
2003 Antoni Pitxot le dijo que ya era tiempo
de ampliar y dedicar todo el edificio a museo abierto al público. Siguiendo sus
consejos amplió la exposición al bajo.
Fue entonces cuando se realizaron las
obras del sótano –bajo por la Calle Botica-, que hasta ese momento servía
como almacén y la entrada se efectuaba
por la Plaza Mayor.
En 2006, con el asesoramiento y por recomendación de su amigo Antoní Pixot,
Director del Museo de Dalí, se terminan las obras de ampliación del Museo Diego
de Giráldez que había
creado a partir de 1998 en la Plaza Mayor de su Villa natal. El Museo cuenta con
un importante grupo de “Amigos de Honor” nombrados desde finales de
2006, los últimos en un acto celebrado en el Teatro García Barbón de Vigo -con
amplia asistencia y repercusión- se procedió a la entrega de los diplomas a
los: “Nuevos amigos de la Casa-Museo, entre los que destacaron la Duquesa de
Alba, María del Rosario Cayetana Fitz-James Stuart y Silva; el conselleiro de
Cultura y Educación, Jesús Vázquez Abad; el general jefe del Estado Mayor del
Ejército, Luís Alejandre Síntes; el general director de la Academia de
Infantería, Adolfo Orozco López; el director del Museo Dalí, Antonio Pixot; el
general director del Museo del Ejército, Juan Antonio Sánchez García, el
magistrado-juez, Antonio Romero; Luís López Basalo, empresario-industrial
hotelero; Pedro Ruíz González, Segundo Jefe del Área de Documentación del Museo
del Ejército; José Luís Calvo Calleja, Delegado Diocesano de patrimonio
Cultural y Artístico y Subdirector del Museo Diocesano de Palencia - Licenciado
en historia del Arte; María Luisa Ilarri Junquera, Licenciada en Historia del
Arte por la Universidad de Santiago y Doctora en crítica textual por la
Universidad de Barcelona; Francisco de Pablos Holgado, Crítico de Arte y
miembro de la Real Academia Gallega de Bellas Artes; Gerardo Pérez Calero,
Catedrático de la Universidad de Sevilla y Académico de la Real de Bellas
Artes; Pedro José Machuca Bernal, Comandante de la Brigada Paracaidista y
Ex-Director del Museo; José Carlos Valle, Director del Museo Provincial de Pontevedra;
Alfonso Zulueta de Haz, Ex-Presidente do Consello da Cultura Galega y
Presidente da Fundación Tutelar Galega Sálvora; José María Franco García,
Licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago, Master en Institución
Jurídica Universidad de Wisconsi, ……; Antón Castro Fernández, Profesor de Arte
Contemporáneo de la Universidad de Vigo y Crítico de Arte; José Fernández
Pérez, Director del Palacio Gaudí -Astorga- Museo de los Caminos; José Ignacio
Ferro Rodríguez, Coronel de la Academia de Infantería de Toledo y Director del
Museo Específico; José Antonio Rodríguez Sánchez, Doctor en Ciencias Económicas
y Empresariales y Profesor de la Universidad de Vigo; José María López
Martínez, Jefe de Intervención Territorial –Pontevedra-; Serafín Villanueva Bembibre,
Profesor de Filosofía Clásica; Alberto Rodríguez Lechón, Presidente del grupo
de Arte y Cultura Muriel; Purificación Vázquez Martínez, Directora del Colegio
Mariano; Lupicinio Peña Arenas, Director Colegio Salesianos de Ourense; Cecilia
Doporto Reguera, Directora Casa Museo Ramón María Aller Ulloa; Emilia Otero
Sotelo, Periodista radiofónica; Carlos Miguel Rodríguez Pérez, Deportista y
empresario; Antonio Montero Carro, Ingeniero, ex director de gestión del Museo
Provincial de Pontevedra, ex gerente del Consello da Cultura Galega, etc.;
Manuel Pérez Álvarez, Ex-Alcalde de la Ciudad de Vigo; Andrés Alonso Sánchez,
Abogado; María Victoria Varela Paz, Empresaria; María del Rosario Paz Andrade;
Mauricio García Román, Médico; José Luís Vázquez López, Presidente del
Instituto de Cultura, Ciencia y Tecnología; Manoel Soto Ferreiro, Ex-Alcalde de
Vigo; Dominga Castiñeira Mardanas, Abogada; Miguel Adolfo Domínguez Alfonso,
Alcalde de A Cañiza; Javier Alonso Docampo, Párroco de A Franqueira; Juan
Suárez Montero, Profesor Mercantil; María Teresa Fernández Piñeiro,
Ex-Concejala de Cultura del Ayuntamiento de Vigo y licenciada en Geografía e
Historia; Dámaso G. Domínguez, Catedrático de Literatura y Director de teatro;
Rosa de la Iglesia Barroso, Funcionaria; José Manuel Fernández Domínguez,
Decorador; Jaime Barreras González Pastoriza, Abogado; Francisco Hernández
Vallejo, Médico odontólogo; Manuel García Castro “Magar”, Fotoperiodista de
Faro de Vigo; Sergio Saavedra Queimadelos, Registrador de la Propiedad; José
María Vázquez Piñeiro, Párroco de Santa Cristina de Valeije; Francisco Manuel
Moldes López, Presidente de la Cámara de Comercio de Pontevedra y Licenciado en
Ciencias Económicas por la Universidad de Santiago; Joaquina Pérez Comesaña,
Contable; Antonio Iglesias Otero, Profesor de Actividades Náuticas; Xosé
Fernando Filgueira, Director-Presidente de la Fundación Filgueira Valverde;
Xosé Francisco Armesto Faginas, Ex-Director del Museo de Vigo y de Faro de
Vigo, Periodista, Escritor y Director de la Universidad Popular de Vigo; Miguel
Ángel Castro Quinteiro, Párroco de A Cañiza; ……..”
En 2007. Una vez terminadas
las obras se inauguró la totalidad de la Casa-Museo en Mayo de 2007 con la
entrada, también, por la Calle Botica.
En el 2009. Realiza la escultura “Luz y Camino” para
la fachada de María Auxiliadora, en Ronda de Don Bosco que es inaugurada en Mayo de 2010. Representa a la Virgen junto a un
niño ya adolescente acompañados de elementos iconográficos como la estrella, el
cordón, la luz y la esfera para trasladar un mensaje de esperanza. Fue colocada
con motivo del centenario de María
Auxiliadora en Vigo.
En 2010 y 2011. Realiza dos esculturas de gran tamaño, con
superficie de 6 metros cuadrados cada una de ellas. Una titulada “El Bautismo” y la otra titulada “Mártires”.
En el año 2011, a partir de ese año
el artista aparece en las listas de algunos medios y revistas especializadas
del mundo del arte como uno de los artistas españoles vivos más interesantes.
El periódico vigués Atlántico Diariose hace eco de la información el día 29/04/2011, titulando la
noticia: “El pintor Diego de Giráldez, entre los mejores del mundo”. En ese
listado figuraban, entre otros: Ai Weiwei, Elena Mikhailovna Kostenko, Marina
Abramovic, Takashi Murakami, Diego de
Giráldez, Frida Kahlo, Yayoi Kusama, Margherita Manzelli, Mariko Mori,
Bruce Nauman, Tino Sehgal, Jeff Koons, Antonio López, Anish Kapoor, Antoni
Tàpies, Maurizio Cattelan, Neo Rauch, Rirkrit Tiravanija, Wolfgang Tillmans,
Lev Voronov, ………..
En Marzo de 2017 el Ayuntamiento de A Cañiza le nombra, por unanimidad, hijo
predilecto.
En Junio de 2017 la Diputación
de Ávila le rindió un homenaje
por la vinculación artística a la provincia y sus 42 años de dibujo, pintura, escultura y anatomía artística.
En Agosto de 2017 en Palencia
es artista invitado de la XXXIII
EXPO AIRE para exponer su obra. Visitaron la muestra más de 14.000 personas.
El 16.08.2017 el Periódico 20 minutos publica un listado de los 25 pintores
más interesantes del momento en
España, titulado: “Mejores pintores españoles contemporáneos vivos”, entre
los que se encuentran: Diego de Giráldez,
Consuelo Hernández, Antonio López, Miguel Barceló, Eduardo Naranjo, Gabino
Amaya Cacho, Eduardo Arroyo, Pérez Villalta, Luis Gordillo, Lita Cabellut,
Juan Navarro, Ricardo Sanz,……..
En Noviembre de 2017. Inaugura una importante escultura en Castilla León sobre “Fernando Álvarez
de Toledo y Pimentel”.
El 28.02.2018 Nick. Barker publica la lista de los 20 pintores más influyentes de España
en el siglo XXI, entre los que se encuentra Diego
de Giráldez. https://listas.20minutos.es/lista/20-pintores-mas-influyentes-de-espana-en-el-siglo-xxi-429384/
En Marzo de 2019. El Ayuntamiento de Vigo le nombra "Vigués
Distinguido 2019".
El 21 de Abril de 2019. Inaugura en Tui el torso en bronce del
profesor y párroco “Don Ricardo García Fernández”.
El día 3 de mayo de 2019 nombran al Catedrático Emérito de Historia del Arte de la Universidad de
Santiago de Compostela, Don Manuel Núñez
Rodríguez, “Amigo de Honor de la Casa-Museo Diego de Giráldez”
En Junio de 2019 le seleccionan para
la exposición que se celebra en Vigo con motivo de conmemorar los 130 años de historia de la Escuela de Artes
y Oficios ligados a la ciudad. En la exposición colectiva se mostraron
trabajos de los pintores y escultores, antiguos alumnos: Diego de Giráldez, Ángel Sevillano, Din Matamoro, Silverio
Rivas, Juan Oliveira, Xosé Lodeiro, Francisco
Mantecón o Luis Torras. Además de los canteros-escultores como Ángel García,
Manuel Pérez, Silvino Silva y de arquitectos como Jenaro de la Fuente, Benito
Gómez Román o Antonio Cominges.
Otros:
Realiza
la escultura para la celebración del 510
aniversario de la Casa de Alba, cuya obra es el torso del III Gran Duque de Alba, obra expuesta en la plaza de
armas del Palacio de los Duques de Alba.
Recientemente realiza
la escultura del torso en bronce de la figura del profesor
y párroco Don Ricardo García Fernández, expuesta en el paseo de la Corredera de la ciudad histórica de Tui.
Su obra está presente en muchos de los importantes museos de Europa,
América, Asia y África -más de 150- y en importantes colecciones privadas
y públicas.
Durante su carrera artística ha expuesto, hasta el momento, en más de 400
exposiciones individuales y en innumerables colectivas, por importantes
galerías de diversas ciudades de las distintas partes del mundo.
En el campo del dibujo e ilustración. En la última década ha ilustrado
varios libros de diferente temática.
En el campo de la anatomía física/artística ha realizado
múltiples obras pictóricas, dibujo y escultóricas. Ha impartido conferencias
y escrito diversos libros, etc. En
2018 presentó su nuevo libro “Anatomía artística y visión
patológica” en varías ciudades española, empezando por Vigo/Galicia
para continuar por Cataluña,……..
Sobre el artista existe una extensa bibliografía, tanto en España
como en Portugal.
En estos últimos años la prensa especializada: secciones de
cultura/arte en periódicos, en algunas revistas y páginas webs,
blogs,…, de arte destacan como 20 artistas interesantes del siglo XX –
XXI, entre los que se encuentra Giráldez, a: Álvarez de Sotomayor,
Miquel Barceló, Ramón Casas, Pancho Cossio, Eduardo Chillida, Salvador Dalí,
Antonio Gaudí, Diego de Giráldez,
Julio González, Tino Grandío, Juan Gris, Antonio López, Joan Miró, Eduardo
Naranjo, Jorge de Oteiza, Pablo Picasso, Joaquín Sorolla, Antoni Tàpies, Daniel
Vázquez Díaz y Fernando Zóbel.
Innumerables y variadas plumas de
distintas ramas del saber y de la comunicación se han hecho eco/han escrito
sobre su obra. Nos hacemos eco de
algunos de los fragmentos de escritos que han realizado sobre el artista:
Xosé Francisco Armesto Faginas (Periodista. Director
de la Universidad Popular de Vigo): “Alvaro Cunqueiro, en tanta
cousas mestre, que tivo tamén moito de neno grande, foi un dos primeiros que
celebrou a pintura de Diego Giráldez. Atopo moitas cousas en común entre
ámbolos dous, por exemplo -algo non cativo- o amor polas pequenas cousas, a
ledicia, poño por caso, ó sentir o canto dun paxaro ou dun galo, coma quen
escoita a voz do mestre solista dun gran coro...”
Álvaro Cunqueiro (Escritor y
Poéta): “Para ser pintor, hai que nacer, hai que soñar durante moito tempo, hai
que atopar un estilo coma él, non son os mais listos, os licenciados, os que o
atopan, algunhas veces son caseque nenos como Diego que saben de labregos, de
ovellas e carneiros, de carballeiras e capóns -eses galos de crestas vermellas
que matan o basilisco-, desas alaceas e lareiras, desas froitas que se lle
poden adiviñar os vermes dentro. Eu para ver os seus bodegóns non teño que
haber xantado. Teño que vir en aiunas, e daquela poido carregar o meu maxín da
poesía que emanan...”
Ramón Piñeiro: “Diego pertence a ese
eido artístico dós novos pintores Galegos que por vocación e con grande
entusiasmo e sensibilidade están levando o nome de Galiza polo mundo. Neste
caso cunha visión propia e orixinal asentada no dominio do debuxo e nunha
composición diferente”.
A.M. Campoy (Crítico de
Arte): “Diego de Giráldez, severo y apolíneo, artista de la contemplación de la
naturaleza, ha traído al arte moderno español un vigor y una nueva
sensibilidad, con este Realismo NAS, que es posible que no tenga comparación en
el arte de los últimos años. No es posible confundir sus bodegones, sus
paisajes, sus mujeres o atribuir a otros sus espléndidos retratos, …. Su
excelente arte está fundamentado en un dibujo prodigioso y realizado siempre en
una materia muy rica y diferente, con base en el pastel”.
J. de Castro Arines (Crítico de
Arte): “¿Qué decir de nuestro gallego, Diego de Giráldez?, Diego es el hombre
que le pone corazón, alma y misterio y soledad y silencio que se transforma en
humano, a su obra en la que se respira poesía, talento creador, del alma
creadora. Y digo que se respira poesía, hay poesía, mucha poesía, que no surge
tan sólo de la severidad del color, de la que tanto gusta Diego de Giráldez,
sino también del mundo espiritual. Pero también hay drama en esos rostros de
labriegos; cuánta tensión expresan, cuanta idealización o esencialización del
drama. Hay tristeza, hay soledad y silencio, ¡Lo hay, también, pongo por
ejemplo, en algunos cuadros de esas ovejas de ojos tristísimos!, donde parecen
saber el destino amargo que engendra su propia naturaleza. Eso también está
pintado, captado por el color y por la técnica e intuición del pintor, de este
pintor que, sin hacer grandes alardes, va más allá del mundo que el pincel
puede abarcar en el terreno de su materia propia, la del color y de la forma,
porque Diego de Giráldez es un pintor trascendente que dejará huella no sólo en
nuestra tierra gallega”.
Camón Aznar (Crítico de
Arte): “Este jovencísimo autor, Diego de Giráldez, tiene una faceta poco
tratada, profunda, como interprete del misticismo católico, con temas de
misterios e historia de la religión, tratados con aguda observación de la
realidad actual que algún día serán objeto de comentarios más extensos, que los
habrá, e incluso me atrevería a decir que posiblemente ejerzan influencia sobre
el arte moderno y este incipiente y diferenciado realismo que ya hoy le eleva y
clasifica entre los primeros nombres de los maestros del realismo español
contemporáneo. Su pintura habla un lenguaje místico y cuenta con un gran
dominio del color y el dibujo”.
Xosé Filgueira Valverde (Escritor): “Din
algúns que este pintor e un mestre que deprendeu o oficio dende pequeno, que
sabe como manexar o pincel, o lápiz e a paleta. Eu vexo unha obra coma as
mellores da nosa terra: clara, limpa, con esa luz -Luz a nai, Luz a aboa- da
nosa vida labrega...”
Francisco Fernández de Riego (Escritor y Presidente
de la Real Academia Gallega - 1998): “A pintura de Diego de
Giráldez…. é o resultado, nun principio, dalgúns cambios que en común posúen
esa indagación interior a través da perfección técnica. A súa vontade de estilo
como pai do Realismo NAS apóiase nos dous alicerces, social e estético,
imprescindibles nunha arte comprometida co espazo/tempo que ao artista tocoulle
vivir en Galicia e España en particular e en distintos movementos artísticos no
mundo en xeral; coas súas xentes, os seus problemas, o seu pasado histórico e
cultural. Unha conxunción artística que lle aproxima e relaciona dalgunha
maneira, desde o pictórico, a ese realismo social-galego concibido a tempo
polos narradores galegos que eloxiaron a súa arte: Álvaro Cunqueiro, Antón
Fraguas, Carlos Casares, Filgueira Valverde, García-Sabell,...”
Camilo José Cela (Escritor.
Premio Nobel): “Gallego universal … Diego de Giráldez pinta labradores curtidos
por el sol, ovejas y corderos que atienden a pastores que vociferan, a gallinas
y gallos que se expresan a través de la profunda mirada. Diego de Giráldez,
artista constante y consecuente, se expresa como español y, al hacerlo así,
como ese gallego que lleva dentro, como hombre de las montañas –leal consigo
mismo y con su infancia-, donde nació, y dentro de ese estilo propio, su
invento, el realismo NAS. Pinta con carboncillo, pastel, óleo o acuarela, con
pincel o con los mismos dedos, aquello que visto con los ojos y transformado
por la mente de su realidad -realidad que vive fuera de la percepción
sensorial- lo convierte en un realismo que se adivina, en un surrealismo
aparente, al mismo tiempo que inquietante y misterioso. Porque Diego de
Giráldez, como hemos podido ver en su prolífera obra, con su realismo NAS,
supera lo natural pero no lo deshecha, lo abstracto y el mismo surrealismo para
refundirlo todo en la culminación de su obra.
Este gallego universal es un hombre
sencillo que cuenta, con sus manos y pinceles, sobre inquietantes lienzos, en
su mundo artístico, las cosas como las ve él, el mundo que pasa ante sus ojos
para ser taladrado, escrutado y adivinado, con un estilo propio, que no
se pudo encasillar. Nuestro pintor ha sabido, lo repito una vez más, crear un
estilo propio, no ciñéndose a caer en los modismos abundantes en el mundo
artístico actual, en esa negra y artificiosa sima del lugar común”.
Gonzalo Torrente Ballester. (Escritor): “Diego
de Giráldez, coleccionista de balanzas, radios, gramófonos, ….., coches
antiguos y gran comedor de sardinas, es, para muchos críticos un realista o un
surrealista……. Veo en su obra integrar el cambio sustancial de estos finales de
los años setenta, recogiendo fielmente las consecuencias de los efectos de las
transformaciones sociales de la postransición, las nuevas relaciones entre los
individuos de diversas culturas, religiones y áreas geográficas que cambiaron
la percepción de lo “real”. Todo ello adecerado con pizcas de su tierra natal.
Es en este contexto donde Diego de
Giráldez crea su, como él le denomina, Realismo NAS y una visión global del
mundo, ofreciendo imágenes de visiones oníricas, reconocidas de inmediato, al
mismo tiempo que improbables en la realidad de lo cotidiano. Diego de Giráldez
es diferente, no es Benjamín Palencia o Salvador Dalí, …., pongo por caso.
Diego es otra cosa y en su mensaje nos pudiera llevar, en una primera
contemplación de su obra, a que se confunda, erróneamente, con visiones de
fantasía”.
Carlos Casares (Escritor y
Presidente do Consello da Cultura Galega): “Teño seguido con atención a súa
obra, hoxe coñecida e valorada tanto dentro como fóra de Galicia. En Diego de
Giráldez coinciden a realidade representada e a forma en que se representa,
podemos falar de acerto expresivo. O pintor é dono do seu mundo e da súa obra.
Estou convencido de que Diego de Giráldez chegou a ese estadio e que agora
pinta con máis liberdade. É a liberdade que a un creador lle da sempre a
seguridade na utilización dunha técnica que emprega con naturalidade...”
Domingo García-Sabell (Académico de
número de la Real Academia Gallega. Escritor. Ex–delegado del
gobierno en Galicia): “Diego de Giráldez, no seu esforzo creador, chouta por
riba das categorías plásticas establecidas...”
Antón Fraguas (Cronista
Oficial de Galicia, Presidente del Patronato del Museo do Pobo Galego): “O
pintor e xenial artista, Diego de Giráldez, vai interpretando os diferentes
momentos do ano ós que Don Ramón Otero Pedraio deu o seu valor xeográfico... O
artista, este pintor, ten un espírito tan altamente creador que fixa as súas
obras no máis fino realismo...”
Antón Castro (Crítico de Arte
y profesor de Arte Contemporáneo de la Universidad de Vigo): “Sin
lugar a dudas, Diego de Giráldez es ya, y por derecho propio, uno de los
grandes pintores de la realidad que bebe en el ancestro poético de tintes
bucólicos”
Xavier Costa Clavell (Periodista,
escritor): “CREATIVIDAD Y ESTILO EN LA PINTURA DE GIRÁLDEZ. Como dijo
Picasso, Giráldez no busca, sino que encuentra, y los hallazgos se proyectan en
las superficies pintadas con un sello propio, algo que sólo está al alcance de
los auténticos creadores. No deja de ser cierto lo que afirma Francisco de
Pablos: “La pintura de Diego de Giráldez constituye hoy, con media docena de
nombres más, el pleno de genuino realismo. También estoy de acuerdo con lo que
dice Santiago Amón: “Diego de Giráldez sabe que el arte es absolutamente
inseparable del oficio. Sabe también que el blanco más blanco nace de la
explosión comunitaria de todos los colores, y que el negro más negro surge
cuando la noche se apodera del fulgor del arco-iris. Un poeta escribió
aludiendo a la obra del pintor: “Te confunde, amigo mío, / quien te llama
realista...”. Cierto, porque la pintura de Giráldez es siempre algo vivo y
lleno de misterio. El de la creación”.
Jordi Soletura (Ministro de
Cultura): “Felicito a Diego de Giráldez por su valiosa y maravillosa obra que
tiene en el Museo de Cuenca y que hace unos días tuve el placer de visitar… Ese
genuino realismo. Esa invención suya, que denominan NAS, hace que nuestro
pintor se sitúe en el interés de las mejores plumas y de los museos más
importantes”.
Francisco Pablos (crítico de arte
y miembro de la Academia de Bellas Artes): “En la pintura de Diego de
Giraldez, en las naturalezas muertas, el consigue la vida, la perennidad, la
trascendencia. Surge y se impone lo inquietante. Lo común se mayusculiza, hasta
lo anodino cobra importancia. Un cacharro, cualquier enser del ajuar doméstico
es él, el único, el irrepetible. Es don cacharro y acaso hasta el excelentísimo
señor cacharro. Diego de Giráldez es un caso peculiar. Su maestro fundamental
es la naturaleza misma, y su capacidad de trascender su inmediata apariencia,
su realidad concreta, han hecho de su obra un capítulo aparte en la pintura
española contemporánea. Ahora goza de admiración y respeto internacional. La
pintura de Diego de Giráldez constituye hoy, con media docena de nombres más,
el pleno de genuino realismo. Sú pintura es única, irrepetible, capaz de ser
reconocida para siempre en cuanto se ha contemplado la indefinible sensación de
uno de sus cuadros”.
Ramón Faraldo (Crítico de
Arte. Miembro de la Asociación Española de Críticos de Arte): “El
Cristo-Hombre de Diego de Giráldez”: Insisto en esta obra de gran
envergadura que ofrece una novedad dentro de la pasional tradición de las
crucifixiones. Esa Cruz, nadie se ocupó de ella. Tú nos haces ver que ella no
tuvo la culpa, que ella iba para mástil de barco, leña de lareira o pie de
bandera, pero los hombres la condenaron a eso, a ser, cómplice del deicidio. Y
esto no lo vio nadie. Ni Valdés Leal, ni Grunewald, ni Salvador Dalí. Tú lo has
visto Diego. La aldea, el largo invierno. La hermandad con pastores y
leñadores, el respeto a la materia bondadosa que nos da techo y calor. Todos
los árboles de la tierra deberían, tendrían que rendirte homenaje, por haber
proclamado la eterna amnistía. Honra y gloria de lo que nace inocente y muere
inocentemente a nuestro servicio”.
Decía Robert Hughes,
controvertido crítico de arte, admirador de Goya y enamorado de Barcelona: “Diego
de Giráldez, al igual que Goya, es un pintor para el mundo. Se ocupó, visto el
cuadro del Cristo-Hombre, de una nueva visión de la crucifixión algo que fue
capaz de crear con éxito a través de lo que se denomina Realismo NAS y que nos
da ciertas esperanzas dentro de las pobres expectativas del arte que
hemos vivido en los últimos años. En este cuadro el autor se convierte, otra
vez al igual que Goya, en uno de los pocos grandes pintores del dolor, en este
caso psíquico; de las humillaciones –la figura de rodillas- y de la absolución
de la masa arbórea terrestre a través de esa cruz inofensiva. La pintura de
Diego de Giráldez abre un nuevo camino en el arte contemporáneo”.
Santiago Amón (Crítico de
Arte): “Diego de Giráldez es ya uno de los grandes del realismo español
contemporáneo... Realista exacerbado, donde encuentra la implicidad de su
poesía. En su obra se reencuentra con lo intrínseco, con las cosas mismas, y
las traslada a la faz incitante del lienzo con precisión lírica. Diego de
Giráldez, sabe que el arte es absolutamente inseparable del oficio. Sabe
también que el blanco más blanco nace de la explosión comunitaria de todos los
colores, y que el negro más negro surge cuando la noche se apodera del fulgor
del arco-iris... Pintor sorprendente, creó un estilo dentro de este nuevo
realismo que denomina NAS (naturalismo, abstracción, surrealismo)... A partir
de la exposición “Maestros del Realismo Español”. Las obras de Diego de
Giráldez son de un nuevo realismo, del óleo y tintas se pasa a una técnica
mixta... Con un gran equilibrio entre la sensibilidad y la técnica, con una
pintura muy elaborada,.... En el transcurso de poco tiempo hay una actitud
positiva del público y quién sabe si de los críticos, así como de los
coleccionistas importantes de arte que empiezan a fijarse en su obra....
Empieza a vender sus primeros cuadros para buenas colecciones privadas e
institucionales, a participar en interesantes exposiciones de pintura española
en España y el resto de Europa, proliferan las muestras individuales en
relevantes galerías.... Y se producen las primeras adquisiciones de obras suyas
por parte de museos.... Su obra va ganando noticia, fama y atención allende las
fronteras.... Termina -EL CRISTO HOMBRE-, obra de gran envergadura, justo
parece destacar, al lado de la virtud poética e histórica del cuadro, el
carácter de proeza técnica, la condición de madera de esa cruz que la secunda
sin deidad, el cristo -el hombre de rodillas-, cabizbajo, la voluntad sin freno
del ejecutor y el oficio que recorre la obra de punta a cabo, tras una génesis
empírica, paciente, gradualmente vivida por el creador, hace a la postre, a los
ojos del observador, una obra magistral....”
Xosé Otero Abeledo “Laxeiro” (Pintor. Vigo-1982):
“Diego, xa sei que muitos dín que eres un realista. Eu véxote como o novo Goya,
pero galego. Xuntando o naturalismo, a abstracción e o surrealismo colocas
caprichosamente sobre telas a dor, que logo vas repartindo polo mundo nunha
mostra que camiña sen descanso por un sendeiro eterno”.
Rafael Sánchez Bargiela (Director del
Museo de Ponteareas): “El realismo NAS, nacido de una personalísima combinación
entre naturalismo, abstracción y surrealismo, ha convertido a Diego de Giráldez
en uno de los principales exponentes de la plástica de este fin de siglo, como
lo acredita su trayectoria y su obra, que forma parte ya de las colecciones de
numerosos museos de nuestra Península y de otros países”.
Florenci Criville i Estraqui (Director del
Museu Etonográfic de Ripoll (Girona): “De Diego de Giráldez se puede decir que
realmente es impresionante su pintura de una rara singularidad… Quiero
felicitarle por seguir siendo original y por patentizar un mensaje poético en
un mundo tan trillado, opaco y reiterativo como el del arte actual...”
Fernando Elorrieta (Escritor y
Director de enseñanza): “El análisis de la obra de Giráldez no puede quedarse
en la estructura epidérmica o superficial del objeto, hay que profundizar en el
sujeto, en el compromiso que oculta tras las rotundidades de la forma y la
precisión del diseño. Es una obra engagée en el sentido hondo de los conceptos
satrianos, el artista es un testigo de la sociedad y del momento, pero en este
caso de una realidad trascendida, que horada las pulsaciones existenciales para
transformarse, divinizarse, en delicadezas sutiles de sentimientos religiosos,
místicos y afectivos. El estudio de una obra perfectamente construida en la composición,
en el cromatismo, en la morfología no debe solapar la profundidad de los temas
que el artista trata, habrá que subirse a la octava esfera para entender la
diafanidad del mensaje que Diego de Giráldez nos envía. Forma y fondo, símbolo
y metáfora, humildad y sabiduría, hacen de este joven demiurgo de la plástica
actual un caso único y singular en el arte”.
Mauro Panizo del Val (Periodista,
Director de Radio Cadena Española en Vigo): “Un día de 1975 un jovencísimo
pintor saca sus cuadros al aire de Vigo y a la curiosidad de los vigueses. Se
llama Diego de Giráldez. Elogios, comentarios, laudatorios y luego… un largo
camino no en el tiempo, sí en la peripecia vital y plástica. Sigue trabajando
intensamente y las exposiciones se suceden durante años: Santiago, Madrid,
Barcelona, Lisboa, Ginebra, París…, saben del buen hacer de Diego de Giráldez.
Ahora sigue pintando, dedicándose a la obra bien hecha. Junto a la línea ágil,
el color rico, expresivo y la composición meditada. ¡Esos gallos apiñados, en una
espléndida creación! ¡Esas flores, hierbas y frutos que tienen como un
sentimiento de vida, un pálpito caliente, humanizado! ¡Esas figuras en las que
junta a la expresividad de los rostros, aparece como un soberbio trabajo! ¡Ese
difícil entramado de ropas y telas, sin envaramientos!...”
Javier Rubio Moblot (Crítico de
Arte): “Diego de Giráldez construye con sus animales meticulosamente pintados y
con esa serie de objetos (fundamentalmente esferas trasparentes) que flotan en
el vacío, un mundo de asociaciones que por otra parte, tienen más que ver con
la metafísica que con el surrealismo…. Diego de Giráldez ha expuesto
individualmente en más de doscientas ocasiones y su obra se encuentra
representada nada menos que en más de doscientos museos importantes del mundo:
España, Portugal, Egipto, Vaticano,…”
Lorenzo García – Diego Pérez (Crítico de
arte): “Toda su obra es una exaltación de paganía y refinado intelectualismo.
Como maestro del arte español actual nos envuelve de magnificencia y nos
liberta de la vulgaridad cotidiana. No hay nada inconsciente en su obra. No
brota porque sí y falto de antecedentes en la obra de este gran pintor. Tiene
trazada de antemano la trayectoria de su arte, seguro como está de que no
habrán de falsearle ulteriores rectificaciones. Es un precoz en la historia de
la pintura. Y no un precoz irreflexivo, inseguro, que luego había de sufrir
amargos desengaños y soportar impuestas rectificaciones…”
Manuel Fraga Iribarne (Presidente
de la Xunta de Galicia): “El pintor Diego de Giráldez nació en el
seno de una familia navegante y, desde niño, se interesó por el estudio y
aprendizaje de los diversos campos artístico. Dotado naturalmente para el
dibujo y la pintura, y armado de un tesón y una constancia admirables, estas
cualidades hicieron de Giráldez un artista singular, portador de un
característico modo creativo y de una personal visión del mundo y de la vida.
Estamos, pues, frente a la obra de un profundo conocedor de los entresijos,
frente a un artista con oficio y con ferviente capacidad creativa, algo que nos
conduce a la esencia del hombre, a la plasticidad del tiempo y del espacio”.
Mariano Rajoy Brey (Ministro de
Educación y Cultura): “Diego de Giráldez, cuya obra y vitalidad merecen ser
apreciados en profundidad y testimonian la calidad de la pintura gallega y
española contemporánea. Creador pujante y salpicado de imaginación, el arte
gallego, tan rico y diverso de tendencias, tiene un gran exponente en la
trayectoria de este maestro pontevedrés del realismo, cuya originalidad estriba
en la perfecta conjugación de lo real y lo onírico. Sus múltiples y numerosas
exposiciones a lo largo y ancho de toda la geografía española, así como en el
extranjero, y la presencia de su obra en más de cien museos, avalan el
prestigio de este artista gallego, cuya obra despierta un gran interés en la
escena artística contemporánea”.
Juan Antonio Sánchez García (General –
director del Museo del Ejército - Madrid): “Existen en el Museo pinturas y
esculturas de artistas de renombre, especialmente de los siglos XIX y XX. Entre
los últimos, figura la personalidad de Diego de Giráldez, pintor representado
en un buen número de Museos Militares (Madrid, Burgos, Barcelona, Toledo...).
En particular, para el Museo del Ejército pintó, en 1996, la imagen de un
“soldado de vigilancia”, un busto de espaldas, un soldado del siglos XX, de una
época que se supone de paz, soldado anónimo, al que en un momento determinado
se pone un nombre particular. El retrato de todos y cada uno de los que han
participado en el Golfo, en Bosnia o han estado destinados en un Regimiento
cualquiera. Esta obra, producto del trabajo de un buen pintor, delata en su
sencillez y pulcritud de factura, no solo la mano de un artista de espíritu
elevado, sino también la representación de la defensa por una Patria, el amor
por sus tradiciones, y en suma, la búsqueda de la paz y la libertad, que tanto
anhelamos y por las que seguimos luchando”.
José Manuel Hidalgo Cuñarro (Director del
Museo Municipal Quiñones de León – Vigo): “Cuando hablamos de Giráldez tratamos
de un artista que se remite únicamente a su psique, un artista que supera lo
real alcanzando lo metafísico, con un mundo íntimo extremadamente rico. La obra
de Diego Giráldez no tiene parangón. A lo largo de su vida se ha preocupado por
la búsqueda de una personal estética que lo hace inconfundible”.
Mª Luisa Ilarri Junquera (Licenciada en
Historia del Arte por la Universidad de Santiago de Compostela y
Doctorada en Crítica Textual por la Universidad Autónoma de
Barcelona): “La opción expresiva de Diego de Giráldez es la pintura figurativa,
construida con un lenguaje original, de factura lisa y dibujo preciso, que
estimula las vivencias de la realidad esencial y la reflexión sobre el misterio
y los grandes temas de la existencia humana. Imbuido de una sensibilidad
mística y franciscana, se preocupa por el hombre y su relación con el entorno,
la naturaleza, los animales, las cosas. Crea un ámbito que se mueve entre lo
físico, lo espiritual, lo real y lo onírico, con un acento evidente de
nostalgias, temores y una poética onírica”.
Enrique Gómez (crítico de
arte): “Este hombre del Norte, de la montaña, conoce el gusto de la felicidad y
el de las lágrimas, conoce el clima que es a la par un tónico y un sedante,
conoce también su naturaleza tan dura para el cuerpo como apetecible para el
ánimo, conoce sus historias, conoce sus gentes,.... En algunos de sus cuadros
se ven las íntimas necesidades humanas, buscadas desde las honduras de su alma,
no desde el corazón que es inartístico, desde el arte que es la mejor técnica
para llegar al alma. Este, traspasa valientemente la realidad, la vence con
realidades, sin competir con la naturaleza, puesto que él mismo es naturaleza,
pero la violenta con surrealidades y la acompaña con un aire de misterio, de
abstracción, cósmico, metafísico corpóreo, poético, onírico, donde se “ve el
silencio” y confunde al contemplador de lo aparente”.
Adriano Marques de Magallanes (Medalla de oro
de la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra. Académico
Correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes de
Granada,……….): “Giráldez, además de sorprendernos continuamente con su
obra plástica, es hombre de aguzada reflexión estética, capaz de articular
conceptualmente el universo que alimenta su creación. Los que seguimos su
trayectoria sabemos que este artista gallego se rige por la, solo aparente
paradoja, del encuentro de tres formas de expresión: Naturalismo, Abstracción y
Surrealismo.
El Naturalismo de Giráldez se funda en
el principio del dominio perfecto del dibujo. Como los grandes maestros –
Leonardo, Zurbarán, Picasso o Dalí - , el artista a partido del estudio
minucioso de la anatomía humana y animal, de la observación atenta de la
naturaleza y del objeto inmediato que lo rodea. Únicamente al partir del
conocimiento profundo de las formas da rienda suelta a su imaginación creadora.
Dotado de una mirada poética, elaborador
de espléndidas construcciones plásticas devenidas en inquietantes metáforas,
Giráldez puede así entregarse, con libertad soñadora, al espacio del
Surrealismo y la Abstracción.
Dota su pintura de una suerte de
sobrerealidad que sorprende e inquieta al observador. Artista genuino:
enriquecer la realidad sin desvirtuarla, dotándola de un nuevo significado”.
José Amiguetti Sánchez (Director del
Museo de la Guardia Civil): “Sus trabajos ofrecen una clara visión de un
mundo natural y escénico, donde predominan las formas vivas, a modo de
bodegones, y de las alegóricas representaciones un tanto místicas, un tanto
grotescas, de seres vivos y naturaleza muerta, flotando en ese ambiente cálido
y abstracto a la vez”.
Leoncio Verdera Franco (Director del
Museo Militar Regional de A Coruña, Doctor en Historia): “Las obras de Diego de
Giráldez producen unas sensaciones que, sobrepasando lo pictórico, despiertan
nuestro inconsciente y hacen que no nos podamos desprender finalmente de la
imagen contemplada; son obras que siempre atraen aunque sin duda desconciertan.
Su pintura, naturalista con tintes surrealistas y oníricos, se ofrece como
única e irrepetible y siempre reconocible por las sensaciones impactantes que
se transmiten desde sus cuadros”.
Fernando Franco (Periodista):
“Cuando entras en su casa de invitado y todo allí parece pretérito, desde la
báscula romana hasta el dosel de su cama, desde la cómoda con un siglo de vida
y de caoba al tocadiscos Dual de aquellos 60 en que era adolescente. Y luego
están sus coches sacados del pasado, comprador de viejas glorias ajeno a las
últimas marcas y modelos del mercado. Diego de Giráldez es un hombre tranquilo
y paseante, encastrado en el pueblo y nada amigo de pompas y boatos. Tranquilo
pero no callado, ni inactivo ni atado porque parece haber hecho de la
España toda su morada cargando con su obra, de museo en museo, de galería
en galería como en un frenético “tour” de músicos rockeros. Nadie sabe cómo
hace pero a veces parece imitar a Dios, presente en todas partes”.
Antonio Almodóvar Azorín (Museo del Aire
Madrid): “El museo del aire tiene en su colección una obra del conocido pintor
Diego de Giráldez, de tema aeronáutico. Ahora bien, el aeroplano que representa
no se corresponde con ninguno real de la historia de la aviación. Es una
pintura de aviones en la que deja una interpretación y mensaje descifrados de
manera distinta por críticos y admiradores. Pudimos admirar y observar
detenidamente este cuadro en la nueva zona noble de la Sala de
Conferencias, Biblioteca, Sala de Juntas y Despacho del Director, en donde se
decidió su ubicación, camino recorrido por las visitas más importantes del
Museo, cuando firman el libro de honor del mismo. Quizás se hayan visto
sorprendidos por este extraño avión que parece volar y también estar parado,
suspendido en un halo de misterio y dirigido hacia un fantasmal y desconocido
infinito, que emociona y al mismo tiempo sobrecoge”.
Manuel Osuna Ruíz (Director del
Museo de Huelva): “Hace años, cuando dirigía el Museo de Cuenca, entre en
contacto con este pintor que terminó teniendo presencia fija con una de sus
obras en el Museo. La obra es de primerisima calidad. Sus creaciones pueden ser
admiradas en muchos museos como puede verse en su curriculum, y en estos
momentos, también en un museo monográfico dedicado a su obra. Diego de
Giráldez, como Saura y Palencia, al menos para un Museólogo, son un ejemplo a
seguir”.
Joan Gómez Vinardell (Director del
Museu d’Estampació de Premià). La obra de Diego de Giráldez. Un cuadro, en el
fondo jugando con el claroscuro había una pluma de ave, acerqué mi vista y
descubrí que no era real. Un dibujo, una pintura, un holograma, un efecto
óptico... surgía del negro hacia la luz, una pluma de ave - ella era un
mensaje- una llave que estaba abriendo una puerta y el paso al conocimiento de
un pintor: Diego. Una obra que gira alrededor de la luz, una luz que circula
del negro hacia el blanco, una luz profunda de tierra gallega, luz que me
recuerda a Rosalía; “negra sombra que me asombra”.
José González Ortiz (Escritor,
Crítico de arte, miembro de la AECA y AICA y Director del Museo
Municipal Elisa Cendrero de Ciudad Real): “LOS GALLOS MÍSTICOS DE LA
NOCHE. Surge un gallo entre el viento, y Diego de Giráldez lo atrapa con
su pincel. Con él, crea un espacio plástico, un poema lírico, donde levitan las
burbujas y se corporean los espíritus de las cosas que antes se desvanecían en
la intermitencias de su memoria. El gallo invita a otros gallos, a las mazorcas
de maíz, a los peces, a un perro, un Cristo..., para que todos conformen y
generen un cosmos dentro del lienzo. ¡Quizás un cuento! en el que Diego narra
su historia, el sueño que palpita nervioso en las puntas de sus dedos. Diego
materializa en el aire los gallos que le arrullan en sus noches, a las palomas
que se embriagan con el arco iris, a los seres queridos que pueblan los latidos
de su corazón. La magia de sus pinturas siembran de sugerencias el paso breve
de la vida, y adornan de colores e imágenes, el análisis, a veces frío y seco
de la razón. (A la obra pictórica de Diego de Giráldez)”.
Eduardo Gavira y Pérez de Vargas (Director del
Museo Militar Regional de Sevilla): “La obra pictórica de Diego de Giráldez,
siendo figurativa, no deja de tener un estilo costumbrista en el que el autor
da pinceladas surrealistas. Es por lo tanto, difícil encuadrarlo en un estilo
concreto, aunque no imposible. Es cierto, que todo el que contempla su obra
queda “enganchado” e impresionado por su realismo y veracidad. Trata de que
haya una conexión entre la naturaleza y la humanidad. Resumiendo: es un artista
completo, tanto en colorido, como en estructura de trazos y composición”.
Gerardo Pérez Calero (Profesor
Titular de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla y Académico
de la Real de Bellas Artes): “La pintura de Giráldez está concebida
como una pura y desinteresada investigación, semejante a un científico o a un
filósofo, como búsqueda de una verdad que no podía ser resuelta más que con esa
meditación laboriosa en el terreno de la verdad que es para él pintar. Esta
investigación es la clave de la esencia pictórica de éste maestro pontevedrés.
Investigación física y de pensamiento, que gusta expresar el mundo real y el
aparente. Giráldez es esencialmente hispánico, o ibérico, en la sencillez, el
mutimo, el ascetismo e incluso el misticismo de muchas representaciones. Así
veo, a Diego de Giráldez. Un místico y un ascético de este final de siglo que
nos ha visto nacer. Atento a su entorno y fiel a sus profundas vivencias, las
que esperamos se alarguen en el tiempo para goce de los que nos emocionamos con
las creaciones magistrales de los artistas”.
José Fernando Sánchez Ruyz (Escritor, Poeta
y Director del Museo Alcázar de Ciudad Real): “En Alcázar de San Juan, en la
primavera de 1995. tuve la ocasión de visitar una excelente exposición de las
obras, de Diego de Giráldez, que aún hoy son recordadas con interés por los
aficionados a las artes plásticas y los artistas de la zona. La relación del
hombre con su entorno se convierte en un estandarte de la obra de Diego de
Giráldez, no en el sentido al que estamos cotidianamente habituados, sino en
una relación profunda donde aparecen con importancia paralela a la intervención
de la humanidad en su entorno natural, en un concepto abstracto, de interrelación
hombre-medio, donde le humano se mide ante el mundo reconociendo su incapacidad
de mejorarlo, sobre este eje central la obra de Diego de Giráldez desarrolla su
simbología y una estética personal que consiguen identificar a sus pinturas y
darles marca de autor. Magia, respeto, emoción, ecología y armonía están
presentes en la obra de Diego de Giráldez, el pintor que desde hace veinticinco
años nos enseña que la belleza de las cosas también puede presentarse sobre
fondos tenebristas. Porque la belleza de la pintura reside en un ápice de
reflejo del propio conocimiento de la vida, que el espectador se encuentra en
todas las pinturas de Diego de Giráldez”.
Breo de Gómez. (Jurista, escritor):
“La mujer en la pintura de Diego de Giráldez”. “La mujer, como pilar de
la vida, es una de las obsesiones en su obra pictórica figurando en muchos de
sus cuadros; yo diría que habita en su pintura. Diego de Giráldez eleva a la
mujer a elemento fundamental de muchas de sus obras donde la sorprende en
actitudes cotidianas, la mayor parte de las veces, y otras llenas de intimidad:
vistiéndose, leyendo, solitarias o callándose sus confidencias, pero siempre
exaltándolas, dotándolas de magnificencias o con exquisitos idealismos
hogareños o campesinos que forman parte de su poesía onírica. Como dice Enrique
Gómez: “donde se respira el silencio y el don de la ternura”.
María Pérez (Redactora jefe
de EL FORO): “Sin lugar a dudas, el artista gallego Diego de Giráldez, inventor
del Realismo NAS, ha adquirido una inmensa fama que hace justicia a la
impactante y original obra que ha desarrollado durante el poco más de medio
siglo de vida que ha transcurrido desde su nacimiento. Es el más alto exponente
de este nuevo realismo, sus pinturas, esculturas y demás manifestaciones
artísticas sostienen su singular encanto. Hoy en día miles de amantes del arte
pueden disfrutar del genio de Diego de Giráldez gracias a los más de 150
importantes museos que ponen su trabajo al alcance del gran público en todo el
mundo y en su Casa Museo en particular, donde se puede hacer un tractivo recorrido
por el apasionante mundo del arte a través de sus cuadros y esculturas.
ANGEL ARNAIZ (Especialista en
Arte Contemporáneo): “La realidad de Diego de Giráldez, sin alejarse de la
figuración, con un dominio admirable de los volúmenes, del color y la
composición, es mágica. Cautiva al espectador con unas formas cargadas de
simbolismo en las que los objetos cotidianos, plantas, animales o figuras
humanas nos trasladan a un mundo de enigmáticos misterios que forman parte de
nuestra realidad. Diego de
Giráldez bebe de las fuentes de los
ultraterreno y participa del encanto de la poesía sin perder el vigor que
confieren unas formas reales, casi vivas, tocadas por un halo mágico.
La mano de este pintor hace que sus
formas pictóricas cobren vida, como ocurre con la maleta del cuadro "Miedo
a la partida” en el que el espectador se siente tentado de cogerla, pero un
pájaro, símbolo de la espiritualización, parece vigilarla para impedir que
alguien se la lleve. En esta misma composición, de la rama de manzano que
reposa sobre la maleta con dos hermosos frutos, uno espera ver salir el gusano
de la manzana en cualquier momento.
La pintura de Diego de Giráldez,
desborda una potencia mágica, de sugerencia, que entra en las extrañas
concepciones de los mundos difícilmente comprendidos”.
FRANCISCO DE PABLOS (Crítico de Arte
y Miembro de la Real Academia de Bellas Artes. Galicia) del
libro:
“
Si Galicia ha sido tardíamente cuna de pintores, en las últimas generaciones.
Diego de Giráldez es un caso peculiar. Su maestro fundamental es la naturaleza
misma, y su capacidad de transcender su inmediata apariencia, su realidad
concreta, han hecho de su obra un capítulo aparte en la pintura española
contemporánea, La perfección formal, la exquisita factura de sus cuadros, esa
precisión casi entomológica de todo lo representado, dan a la obra de este
pintor la calidad de maestro del realismo. Un realismo diferente, de poética
implícita, más que explícita. De imaginable y casi imaginario misterio, porque
salvo excepciones, Diego de Giráldez no se aleja de la representación estricta
de los objetos, con la paradoja de que los inanimados parecen que tienen vida,
mientras que los que cuentan con ella la han abandonado en un tiempo
indefinible, como si fueran cadáveres incorruptibles. De ahí que haya
interesado a la crítica más exigente, hasta el punto de provocar entusiasmo en
críticos tan importantes como el trágicamente desaparecido Santiago Amón”.
LORENZO GARCÍA-DIEGO. (Crítico de Arte
(Barcelona). “DIEGO DE GIRÁLDEZ PINTOR DE REFINADO INTELECTUALISMO”: “Pintor
que, además de conocer como pocos el oficio, siente la preocupación del
"bien hacer", con sujeción a normas basadas en lo tradicional de la
pintura española, de noble ritmo y prestigio elevado, es que concede la debida
importancia la línea y la psiquis del modelo, sabiendo convencer de la dignidad
de su arte. Toda su obra es una exaltación de paganía y de refinado
intelectualismo. Como éste joven maestro del arte español actual nos envuelve
de mangnificencia y nos liberta de la vulgaridad cotidiana. No hay nada
incosciente en su obra. No brota porque sí y falto de antecedentes en la obra
de este gran pintor. Tiene trazada de antemano la trayectoria de su arte,
seguro como está de que no habrán de falsearle ulteriores rectificaciones. Es
un precoz en la historia de la pintura gallega. Y no un precoz irreflexivo,
inseguro, que luego había de sufrir amargos desengaños y soportar impuestas
rectificaciones. Sus bodegones son de un simplicismo encantador, tiene la
intensidad y la jugosidad de la transcripción fiel y la gracia de un tecnicismo
depurado. Son obras no de ayer ni de hoy, sino de siempre, por el nobilísimo
afán que impulsó al artista a realizarlas. Diego de Giráldez ha querido
demostrar, y lo ha conseguido, que llevando a las superficies cuidadosamente
preparadas, elementos sencillos y humildes de carácter aldeano, sin la menor
afectación y con toda limpieza, logra el artista a más de interesar,
conmocionar por el caudal de fervor puesto en lo realizado. Por lo demás, esta
obra significa un alarde técnico, por que ningún fragmento de sus cuadros se
advierte el menor cansancio del artista dejando los temas sin resolver
dignamente. Diego trabaja siempre pacientemente, amorosa y concienzudamente,
mereciendo su obra el aprecio en que se la tiene. Adelante, Giráldez, y
enhorabuena”.
JESUS CHAPARRO QUEIJA (Cronista. Huelva):
“Diego de Giráldez hoy en día es un maestro del Realismo que, en opinión de
críticos tan significativos como Santiago Amón y Ramón Faraldo, es un
"pintor sorprendente" que creó un nuevo estilo dentro de este nuevo
realismo combinado con naturalismo, abstracción y surrealismo”.
Es un nombre de excepción entre la
pintura contemporánea de los últimos años. Su obra es reconocible a simple
vista, entre todas las demás.Ahora lo tenemos en Huelva, con una excelente y
valiosa exposición para deguste y deleite de los que aman el arte con una
expresión viva y con una interpretación de lo cotidiano, lo sublime y lo
absurdo, que la hacen única y necesaria para desconectar del cotidiano que
hacer”.
VICTOR GAY. (Crítico de Arte.-
Girona): “De Galicia llega este pintor y escultor, si bién en esta ocasión
muestra exclusivamente pintura. Una búsqueda del realismo centrado en el motivo
o argumento principal, especialmente en bodegones, donde los tonos fuertes,
rojos de las crestas de las aves o de los crutáceos son lanzados, puestos en un
primer plano por el negro de la noche, todo sobre la noche, incluso el paisaje
sin cielo o de negra noche. De vez en cuando, como un rompimiento, aparecen
unas burbujas flotantes que rompen la lisura del trasfondo. Una flotación que
trasfiere vida y movimiento. Busca efectivismos en un bodegón con pavo, cruz y
vino que cae sobre su pico. Símbolos. Hay así mismo bodegones áridos, con cesto
de mimbre, hojas y ramas secas. También un retrato de perfil sobrio con el
conjunto. Es como una invitación silenciosa de lo oscuro, para sobre ello
situar un contraste, aquello que más le interesa desequilibrar el color y
conseguir una mesura en el conjunto”.
Fernando Mon (Crítico de
arte. La Coruña- Madrid): “Decimos "adelante con el realismo",
por la incidencia de numerosos pintores que ahora, precisamente están volviendo
a estos modos de expresión específica. Pero lo que se ha anunciado como un
sistema de realismo subjetivo por parte de los más decididos edalides de la realidad
vigente, en Diego de Giráldez, pintor de joven ejecutoria, representa la más
objetiva realidad. Esto es, un sentido de la realidad tal como ha sido vista
por los pintores flamencos del diecisiete. Diego de Giráldez que ama todo lo
que le entorna, todo lo que es cotidiano, ha dado cima a unas obras realizadas
con mimo acariciante que representa esa cotidianeidad y ese entorno de las
cosas amables que nos rodean cada día. El resultado pues, es una especie de
serenidad eurítmica que ya, desde los griegos, se llamaba "armonía de las
esferas" y que tanto utilizó el bajo medievo para atemperar y ajustar su
afán de orden y, particularmente de ordenación.
Pero además la virtud de Diego de
Giráldez, aún, repito, a pesar de su juventud, es la de haber medido con exactitud
el diálogo de los colores por los que se trasluce asimismo, una exacta armonía
y una mesura cromática de grandes calidades. Diciendo para terminar que Diego
de Giráldez es un dibujante de trazos seguros, límpios y contínuos, decimos lo
más sustancial que alberga su pintura, excepcionales cualidades formales”.
RAFAEL SÁNCHEZ BARGIELA. Director del Museo
de Ponteareas (Galicia): “La fortaleza de Sobroso, levantada en un promontorio
rocoso del monte Landín, domina desde sus atalayas una amplia panorámica que
justificó su erección como elemento de control del sistema defensivo de la
tierra de Turonio, en la Edad Media. Hoy este castillo es testimonio
de épocas pretéritas pero también de la voluntad colectiva de conservación de
nuestro rico patrimonio cultural.
Estos muros que conservan todavía los
signos lapidarios de sus artífices, acogieron en otros tiempos los
destacamentos militares que controlaban esta tierra y a los representantes de
los condes de Salvatierra y Marqueses de Sobroso que dominaban la amplia
jurisdicción que llevaba el nombre de Sobroso. Escenario de luchas en época
medieval, todavía hoy tradiciones y leyendas populares nos refieren la
permanencia de una memoria histórica.
La instalación en sus dependencias de la
obra pictórica de Diego de Giráldez constituye un enriquecimiento del contenido
de esta fortaleza, que no será admirada sólo por sus estructuras como fortaleza
militar, signo de otras formas constructivas y de diferentes modos de vida,
sino por las propuestas que nos muestra la obra pictórica de este artista.
El realismo NAS, nacido de una
personalísima combinación entre naturalismo, abstracción y surrealismo, ha
convertido a Diego de Giráldez en uno de los principales exponentes de la
plástica gallega de este fin de siglo, como lo acredita su trayectoria y su
obra, que forma parte ya de la s colecciones de numerosos museos de nuestra
Península y de otros países
Con esta exposición permanente de su
obra este castillo ve incrementado su atractivo y ofrece junto a sus muros
centenarios una muestra pictórica que forma parte también de nuestro común
patrimonio cultural”.
JOSÉ A. PEROZO. (Periodista,
Escritor): “La pintura de Giráldez no es fruto de la casualidad. Es una obra
pensada, producto de la reflexión y de la intencionalidad comunicativa. Este
pintor de finales del siglo XX no quiere transmitirnos únicamente lo que sus
ojos pueden captar, nos ofrece la vida y la realidad reelaborada. Estoy seguro
de que detrás de cada uno de sus cuadros hay una historia o, mejor, una novela,
un poema, una posición épica ante la realidad circundante que desea legar al
futuro. La suya es una obra aleccionadora; como la de los antiguos
constructores de catedrales, sujeta a códigos iconográficos que pueden estar perfectamente
conectados con la más vieja de las tradiciones de transmisión de pensamientos e
ideas mediante lecturas indescifrables a primera vista. Muchos de sus cuadros,
que parecen explicarse por sí mismo, no son tan simples de interpretar. Yo me
permito interpretar que estamos ante un gran autor que piensa su obra y que
deforma la realidad según su espejo interior, etiquetas al margen. Como es
natural”.
JESÚS PANDO MARTINEZ. (Periodista,
Guionista y Cineasta. Galicia): “Como periodista, pero sobre todo como
cineasta, la obra de Diego de Giráldez me sugiere un guión inquieto, aunque de
pulso firme, cargado de verdes metáforas, de naturaleza vida, que discurre por
campos húmedos de hierba seca, de solanas hechas de atardecer, de carballeiras,
de fruta fresca, de pocas palabras escritas con intensos momentos, con una
madre omnipresente, inquieta y paciente, sentada al cobijo de la lumbre, con un
niño rabioso por deformar sobre papel de estraza las hebras de un pincel que
profundiza en lo auténtico, adornándolo de un simbolismo cuajado y concreto,
humano, maestro en el sabio arte de comunicar a través de imágenes aparentemente
planas, pero que al observarlas con la mirada perdida entre su atmósfera de
sueños, se antojan profundos, profusos, libres de ataduras, esclavos de un
estilo auténtico y personal. Soy un cuerpo agradecido, que se deja arrastra
hacia la orilla de lo inusual, intentando con todo el caudal del que dispone mi
deseo, atravesar el umbral de los puramente artístico y así poder sumergirme en
la obra y gracia de un hacedor de pasiones, un talento para disfrutar y
aprender; todo un artista: Diego de Giráldez”.
CÉSAR ROVIRA. (Crítico de Arte):
“En la pintura de Diego, lo primero que destacaría son sus tratados de anatomía
donde con máxima perfección tanto en la estructura interna como externa, es de
una precisión casi absoluta, el símbolo está presente en la obra de Diego de
Giráldez, dándonos un mensaje literario, donde podemos ahondar en los conceptos
de la vida misma. La abstracción que aún llegando desde otro punto nos dá un
hermosísimo sentido abstracto debido al escenario donde se representa la acción
de los objectos que disgrega de manera dispar-surrealismo. Es un pintor
distinto, para mí genial”.
MARÍA DO CARME KRUKENBERG. (Escritora y
Poeta. Galicia): “En Diego de Giráldez ¿qué é, o que siginifica seu realismo?
A perfección do debuxo, o coñecemento de
tódolos elementos necesarios para pintar un corpo, unha natureza morta, un
galo, un can... . Penso, que mirando detidamente cada un dos cadros (que eu
coñezo), hai algo máis que a pura realidade dos seres e das cousas. Eisiste un
intimismo metafísico na composición e no trasfondo do realizado. Pode que sexa
o silenzo da soedade, ou a calada compaña de sí mesmo. Do que quere e tén que
dicir, en todas e cada unha das ideas de realidade irreal que incorpora, que
plasma concienzudamente na obra acabada. E como unha necesidade de facer vivir
a alma da materia, o espíritu do inanimado. Intentar o resurximento de vida nun
concepto cósmico dos elementos que ten a súa beira. Non é preciso ningún
desacougo na busca para atopar o seu camiño, anda permanentemente por il, como
polos soños.
Vai dereito pola imaxinación
reivindicando o mundo feito a súa medida, deixando os coñecemntos estudados,un
tanto ó marxen do íntimo facer. Os mestres andan devagar polas catro esquinas
do bastidor, ollando as pínceladas, ollando para a man lizgaira que sen presas
vai enchendo de linas e cores a tela, que vai imprimidno sensibilidades
aprendidas no corazón do tempo.
Reixeitar o realismo máxico é como
desprezar a vida de cada intre. É refugar a vida, é morrer no esquecemento da
noite.
Diego de Giráldez é simplemente un
PINTOR que se chama Diego de Giráldez”.
SANTOS SAN CRISTÓBAL SEBASTIÁN. (Director del Museo
Catedralicio y Diocesano de Mondoñedo y Director del Museo Rodera Robles de
Segovia): “Diego de Giráldez es un gran artista que sabe ver e interpretar con
suma delicadeza y bello colorido las cosas que nos rodean. Así lo hicieron
siempre los grandes artistas desde la prehistoria.
El pintor de Vigo Diego de Giráldez es
de los uno de los artistas que están marcando nuestra época, con vistas al
futuro; y además cimentándose en toda la producción pasada artística de Galicia
que ahora se ve grandemente incrementada por su obra.
Las obras de Diego de Giráldez figuran
ya en bastantes de los museos españoles, que ven así incrementadas sus
colecciones. Es más: El artista además muy pronto va a contar con su propio
museo. Este va a ser el más representativo y completo exponente de la obra
pictórica que nos ha dejado hasta el presente; y de la que cabe esperar que nos
ha de legar en el futuro”.
BIEITO LEDO. (Editor Fundador
de la Asociación de Editores de Galicia. Miembro de la Fundación
Premios de la Crítica): “Cando me encontro con Diego de Giráldez,
circunstancia que acontece con relativa frecuencia e case sempre na rúa
Príncipe, donde ten un dos seus estudios, penso automáticamente nas terras de A
Cañiza, de onde procede o noso gran artista.
Están estas terras no medio do camiño
entre Ourense e Vigo e mesmo a punto de deixar de estalo. Dentro de poucos días
cando se abra definitivamente a autovía e xanon haxa necesidades de parar neste
territorio frío deixará de ser lugar de parada obrigatoria como o era cando as
estradas e os outos eran como eran.
Se é certo o que di o poeta Rilke que a
patria do ser humano é a sua infancia, os críticos e estudiosos do noso pintor
terán que analizar como os galos, os burros, as mazás, os ovos, os pementos...
todo ese universo mundo que Diego retratou de pequeno con eses profundos e
curiosos ollos por terras do Parandanta. Unha maneira de poseer todas estas
realidades da súa infancia é reinventalas na soedade do seu estudio en A
Cañiza, terá que seguir sendo lugar de referencia obrigatoria no mundo
pictórico de Diego de Giraldez”.
JESÚS GUERRA. (Director del Museo
Diocesano de Lugo): “Un 11 de abril de 1995 llegaba una obra, un cuadro de
Diego de Giráldez, a la Catedral de Lugo, en cuyo trifório está
ubicado el Museo Diocesano, donde se encuentra el precioso cuadro
de 86 cm. de alto x 66 cm. de ancho.
Allí mismo, y sin agua, lo bautizó
Diego, poniéndole por nombre "Flores del Campo". Y a fe mía que el
nombre estaba acertado, pues en dicho cuadro aparece pintado con singular
maestría un frasco de EKO, o algo parecido y en él un manojo de rojos digitales
entreabiertos, mezclados con otros tallos de flores amarillas y blancas. Diego
me pidió que lo colgase en un lugar próximo a la puerta de acceso al Museo. No
lo hice, porque me pareció más indicado colgarlo en la sala de arte profana.
Allí se halla hoy, y no son pocos los visitantes que dirigen sus ojos a dicho
cuadro y una alabanza al autor del mismo.
No me gusta hacer crítica de nadie y
menos de un gran pintor como Diego de Giráldez. Pero debo manifestar que su
pintura me gusta. Es un artista genial y buen retratista de la naturaleza. Y
más que dejar volar la fantasía, como un Picasso o un Dalí, se limita a
ofrecernos sencillamente la realidad poética de las cosas cotidianas, tal como
se puede ver en "Gallos en la Feria", " Reflexiones a la
vida" o "Campesino".
Si por las obras se conocen los autores,
no dudaría en calificar a Diego de Giráldez como un hombre frío, flemático...”.
LALO VÁZQUEZ GIL. (Periodista, Escritor y
Cronista Oficial del Ayuntamiento de Vigo): “Hace algunos años- estaba yo en
Valladolid-, algunos amigos me dijeron que exponía un gallego excepcional, una
colección pictórica realista, surrealista o "casi", que no dejase de
verla y que les diese mi opinión. Un profesor vallisoletano que había dado
clases en un Instituto de Vigo, me dijo que era "onírico". Con lo que
se acercaba, evidentemente, al surrealismo y que ¡era vigués! "¿lo
conoces?" "Debo conocerlo". Y enseguida añadí: "Si es, si
pinta como dices, seguro que es Diego de Giráldez".
Y lo era. Allá me fui y aunque no estaba
en la sala gozamos y comentamos su pintura filosofando y lucubrando en torno a
su obra.
La muestra era verdaderamente
excepcional y se celebraba en la acreditadísima sala del Centro Gallego,
sociedad cultural, artística y difusora de todo lo gallego, con amplias miras,
de gran prestigio en los medios entendidos y cultos de la ciudad de Felipe II.
No me extrañó que la exposición alcanzase tanto éxito en una ciudad conocedora
del buen arte. Jamás me defraudó Giráldez en ninguna de sus salidas. Y aquí
menos- en Valladolid, porque todo el mundillo artístico se hizo lengua de su
buen hacer y así presumieron sus amigos y sobre todo los gallegos
vallisoletanos.
Todos los visitantes entendieron el arte
de Diego de Giráldez, que transciende más allá de lo gallego para hacerse
universal en ese mundo de símbolos que introduce en su obra con pinceles de
paciente pintor, de medidor, sin prisas, del tiempo, del último detalle visual
hasta alcanzar esa perfecta realidad no exenta sin embargo, de su huella
personal intencionada.
Porque el pensamiento, su sentir, sus
deseos, sus ideas, sus mensajes, sus secretos, Diego de Giráldez no los expresa
solo con sus representaciones, con la composición extraña, filosófica, a veces
tétrica o advertidora de que hay un mundo esotérico y exotérico.
Diego de Giráldez lo manifiesta también
con la exactitud de visión y de plasmación material, a propósito, situándose
fuera de la órbita de la moda algunas ya demodés, en un punto que ha querido
escoger a conciencia sin encasillamientos absoluto y en el que se mueve por
convicción.
Así, sus figuras, esos cristo
extrañamente crucificados, esos paños, esas aves, esos objetos vulgares-
enriquecidos- van más allá de la materialidad ya simbólica tópicamente si misma
y se transforman en algo más sublime porque Giráldez las conjuga y las
envuelve, invirtiendo y trastocando su significación iconográfica.
Y ahí está la dificultad para entender
la pintura de Diego en su simplicidad.
Hay en sus cuadros algo que nos
inquieta, que no llegamos a entender absolutamente...”.
Rafael Ruíz Sanchidrián. (Director del Museo
Nacional del Ferrocarril. Madrid): “En el Museo Nacional del Ferrocarril y más
concretamente, en la sede de la antigua estación de Madrid Delicias, hay un
cuadro de Diego de Giráldez. Se titula "Puente Ferroviario de
Redondela" y entró en el Museo en el año 1987.
El Museo del Ferrocarril acoge una
magnífica colección de objetos ferroviarios que van desde grandes locomotoras hasta
pequeños modelos. No es un museo de pintura, pero también tiene cuadros con
motivos diversos, entre ellos y respetando todas las opiniones, siempre me fijo
y debo reconocer que tengo más cariño por aquellos tienen motivos ferroviarios.
El ferrocarril ha sido fuente de
inspiración para muchos artistas y le ha permitido desarrollar sus inquietudes
y habilidades.
Cuando en ocasiones enseño personalmente
el Museo y comento algo sobre los cuadros, presumo del cuadro del Puente de
Redondela. Se trata de un cuadro que no es realista pero se acerca, no es
abstracto pero se aproxima y sobre todo atrae al visitante y a aquellos que
conocen Redondela o que han viajado en tren por Galicia y conocen sus puentes.
Inmediatamente lo reconocen.
En el Museo Nacional del Ferrocarril
sabemos menos de artes plásticas que de trenes, pero sí que sabemos apreciar un
buen cuadro ferroviario hecho con genialidad, cariño y que tiene algo de
misterio”.
Román Pereiro Alonso. (Comisario Museo
R.C. Celta y Presidente de la AGCA. Galicia): “En tiempos difíciles
para la pintura, en el sentido más tradicional, Diego de Giráldez, ajeno a
modas o "ismos", consigue la vigencia de su arte al situarlo en ese
espacio de yuxtaposición ideológica y obsesiva de lo real. Estamos hablando del
inventor del Realismo NAS.
Hay en la obra de Diego de Giráldez una
mística de vida y sacrificio. Una paloma, un cordero o unas gallinas recién
salidas del corral que esperan en un rincón de penumbra el momento de asumir el
protagonismo de la inmolación.
Otras veces busca en un espacio de telas,
soledad y silencio, todo el símbolismo reparador de la cultura, EL "Agnus
Dei", cubierto de rojo litúrgico, preparado para el ceremonial del
sacrificio. Igualmente dispuesto el "Cristo Hombre" (1982), uno de
sus cuadros más emblemáticos pintado con sabia ejecutoria en la cumbre de su
carrera. Un Dios, al tamaño natural de un hombre, que se resigna a un trágico
destino: Un giro de pesadumbre en la cara, arrodillado y desnudo, con los
mínimos elementos complementarios para el máximo poder evocador….”
Fernando Franco. (Periodista:
Faro de Vigo): “No sé si nació con el "de" que precede a su apellido
pero, si así no hubiera sido, bien está que se lo haya añadido y apropiado
porque le viene al pelo a su obra, esa que te traslada a tiempos de los grandes
maestros castellanos. A uno Diego de Giráldez le parece a veces un ser de otra época
caído por azar en el presente, la misma sensación que cuando entras en su casa
de invitado y todo allí parece pretérito, desde la báscula romana hasta el
dolsel de su cama, desde la cómoda con un siglo de vida y de caoba al
tocadiscos Dual de aquellos 60 en que era adolescente. Y luego están sus coches
sacados del pasado, comprador de viejas glorias ajeno a las últimas marcas y
modelos del mercado.
Ahí tienen a un hombre tranquilo y
paseante, encastrado en el pueblo y nada amigo de pompas y boatos. Tranquilo
pero no callado, ni inactivo ni atado porque parece haber hecho de la
España toda su morada cargando con su obra, de museo en museo, de galería
en galería como en un frenético "tour" de músicos rockeros. Nadie
sabe cómo hace pero a veces parece imitar a Dios, presente en todas partes.
A su realismo le apellidó NAS, que es
naturalismo, abstracción y surrealismo. Un galimatías que sólo a él le
pertenece, pero que nada importa cuando una obra se explica por sí sola. Sobre
el lienzo anda su universo desplegado, poesía y magia, técnica precisa, lirismo
despiadado. Que los dioses le confundan, como él parece confundir a veces a los
dioses desde las intimidades de su sonrisa inacabable”.
Dra. Cristina Fernández de Kirchner. (Presidenta
de la Nación Argentina. Buenos Aires-Argentina. Febrero de 2008):
“"El Realismo NAS de Diego de Giráldez". Las obras de Diego de
Giráldez, me resultaron de sumo buen gusto y además quiero destacar algo muy
importante: La importancia que reviste para el arte actual el innovar, crear
una nueva visión del mismo. Fusionar el naturalismo, la abstracción y el
surrealismo no puede más que auspiciar una etapa de nuevas creaciones de seguro
enriquecedoras para el mundo del arte”.
David Mourão-Ferreira. (Escritor y poeta.
Portugal): “A pintura de Diego de Giráldez é de uma maestría e de um talento
indiscutível. Nada de comum com as reproduções efectuadas por inúmeros
artífices de últimas gerações. Nos quadros de Giráldez verificam-se realidades
autónomas, ergidas pela força de um olhar e um fazer diferente e original….”.
Manuel Almeida Brandáo. (Director do
Museu de Ovar – Portugal): “Diego de Giráldez demostra ser um artista criativo
pelo que podemos colocá-lo no grupo dos independes. Amante do mar, da paisagem
ou seja do mundo que nos rodeia. O Realismo NAS: Naturalismo, abstracçáo e
surrealismo sáo as bases da pintura de Diego de Giráldez, sobrepondo nos seus
quadros conceitos e formas desta tendéncias.
A obra de Diego de Giráldez desperta nos
observadores uma sensaçáo de atracçáo pelos seus quadros e um grande equilíbrio
entre a sensibilidade e a técnica.
Podemos concluir que estamos perante um
artista autodidacta e excepcional, reconhecido pelas mais altas
individualidades do mundo cultural”.
Manuel Jorge Pereira de Carvalho. Director: MUSEU MILITAR DO PORTO.
Da obra pictórica de Diego de Giráldez
chega-nos o eco das exposiçóes que tem apresentado ao longo de uma vida
dedicada á expressáo plástica.
O Museu Militar do Porto tem a honra de
possuir, no seu acervo, desde 1.999, a sua pintura de título "O
Casco" a qual se enquadra tematicamente no ámbito de algumas outras obras
com cariz militar de sua autoría, como "Bota e gorra" de 1.996, ou "Dous
Soldados" de 1.997. Estas obras, aparentemente explícitas nas suas
reprensentaçoes, deixam margem para o pressentimento de leituras nas
entrelinhas.
Em "O Casco" se o rigor do
desenho é evidente, assalta-nos sobretudo a suave mas inquietante expressaó
realista em que o objecto assume um forte sentido simbólico que sugere diversas
interpretaçóes.
O capacete poisado, entrega-se á guarda
da vigilia da lua, numa paleta cromática de tons escuros, entre um terra, o
azul e o negro, de que o verde do casco se destaca. A figura humana está ausente,
mas, a sugestáo do descanso do guerreiro, confronta-se, quem sabe (?), com uma
pontencial homenagem áquele que, dando o melhor de si, em dura batalha tombou.
A leitura da obra acentua-se até no
enquadramento de dupla moldura que valoriza o carácter honorifico que, no
conjunto, encerra um forte sentido poético”.
Ana Paula Cardoso. (Museu Municipal
Santos Rocha. Portugal): “Fundado em 1.894, o Museu Municipal Santos Rocha
integra nas suas colecçóes um importante espólio de pintura, cujo
enriquecimento se tem realizado progressivamente, com especial incidéncia nos
Anos 40-50 e 80-90 do século XX.
A súa programaçáo criteriosa tem
permitido a realizaçao de exposiçóes temporárias neste espaço museológico
portugués, procurando divulgar artes e artistas, alargando sempre que possível
os seus conteúdos museológicos, com particular interesse pela divulgaçáo de
nomes e obras de artistas ibéricos, mesmo que através do extravasar das
fronteiras nacionais.
É assim que se realiza, em 2.000, uma
exposiçáo de Diego de Giráldez neste Museu Municipal, intitulada EL realismo
"NAS". A mostra, que integrou cerca de 30 trabalhos, apresentou-se
como um conjunto admirável e revelador do seu universo artístico e da sua
intemporalidade, estabelecendo-se como um percurso pessoal pelo naturalismo,
abstraccionismo e surrealismo, resultado natural das múltiplas influéncias que
o artista angariou ao longo da sua vida.
Foi através desta exposiçáo que o Museu
Municipal Santos Rocha víu enriquecida de sobremaneira a sua colecçáo de
pintura, sendo a partir de entáo possuidor de uma obra de Diego de Giráldez,
denominada "Ella Mira"”.
Gaspar Alorda Fiol. (Director del Museo
Histórico-Militar Castillo de San Carlos): “El Museo Histórico Militar Castillo
de San Carlos posee el cuadro "Soldados en Formación", firmado por
Diego de Giráldez y fechado en 1996.
El Museo cuenta con una obra realizada
en plena madurez pictórica dentro de su proceso creativo. Tras un fértil
recorrido por tendencias naturalistas, abstractas y surrealistas, el
pontevedrés logra aunar, en un solo estilo, ingredientes tan dispares y
consigue finalmente un lenguaje pictórico realista de raigambre surrealista.
"Soldados en Formación"
destila simultáneamente equilibrio, inquietud e incluso desasosiego, como si
existiera una amenaza oculta en la mitad de la noche. Estos tres observadores
anónimos parecen enfrentarse a un destino desconocido, dentro de una atmósfera
ingrávida repleta de poesía. Tal idea vendría refrendada por la ausencia de
color, el marcado carácter escultórico derivado del claroscuro y el absoluto
protagonismo del dibujo”.
Margarida Ruas Gil Costa dos Santos. (Directora do
Gabinete de imagen e Comunicação da EPAL. Directora do Museu da Água e
presidenta de APOREM. Lisboa- Portugal): “Quando falamos do nome de Diego de
Giráldez, estamos a falar de un artista realmente singular, que transporta para
as suas telas emotividade e sensibilidade impares.
As suas pinturas representam uma outra
forma de comunicar, percorrendo-nos interiormente, transportando-nos para outra
dimenção.
A sensação de contemplar obras que fazem
inventar histórias improvistas, que deixam viajar pelo imaginário até à poesia,
que cegam momentáneamente com os seus maravilhosos jogos de luz e movimento.
Os temas que a generalidade das pinturas
invoca, falam de mistérios do quotidiano, da essència e beleza das coisas, dos
frutos, dos animais, do corpo. São trinta e quatro anos que traduzem, na
verdade, uma vida inteiramente à arte.
A contemplação da sua obra toca-nos
até... talvez ao absoluto e de certo ele é tocando no acto da criação”.
Ana García Martín. (Técnico Superior de
Arte Museo de Cáceres): “LA NOCHE, 1992. Diego de Giráldez
100 x 80 cms. La obra representa una gallina apoyada sobre un pote metálico. La
gallina está representada de perfil, en una posición de reposo, apoyada sobre
el borde del recipiente. Su plumaje, de colores claros, así como la cresta
rosácea y el pico amarillo, destacan sobre el fondo neutro oscuro en el que se
recorta la figura.
Del pote también sobresale una rama de
árbol, probablemente un níspero, con algunas hojas verdes, que ayudan a
equilibrar la composición.
La parte inferior del dibujo se muestra
en una tonalidad marrón que actúa como suelo en el que aparece una ramita
florecida y en el que apoya el pote, cuyas tres patas crean sus
correspondientes sombras alargadas, que se pierden en profundidad, ya que este
suelo marrón se va difuminando poco a poco hasta convertirse en el fondo negro
que domina la composición.
La obra se encuadra dentro del realismo
propio que define al autor. Un realismo detallista, donde se pone de manifiesto
el dominio del lápiz y del dibujo, un dibujo minucioso, como se muestra
principalmente en el plumaje y en la cabeza del ave, o en las ramas del árbol.
Un realismo que aporta delicadeza y serenidad a este bodegón, así como una
elegancia austera.
La obra está firmada y fechada en el
ángulo inferior derecho: " Diego de Giráldez / 1992"”.
Pedro Machuca Bernal. (Director del
Museo de la BRIPAC): “Diego de Giráldez es un pintor de una dilatada trayectoria
pictórica que incluye la temática militar.
La obra que hoy está en el Museo
de la BRIPAC pintada, en el año 1997 y titulada "Suministros
desde el aire, Paracaidistas".
En la simplicidad gráfica de la obra y
su gran valor artístico se representa la teórica simplicidad del combate paracaidista."”.
Sergio Mourâo. (Crítico de
Arte, Universidade do Porto e Crítico de O Primeiro de Jornais. Portugal):
“...A pintura de Giráldez, enquadra-se num "realismo" expressivo,
cheo de pesquisas e sugestoes. No dominio pictórico e naturalista, nota-se
intencionalidade, personalidade e factura. Elementos essenciais que definen uma
pintura...
.........Este "realismo"
expressivo e de cariz romántico traduze simultaneamente a realidade que o
artista tem diante dos olhos e aquela que potencia a sua mente...
.........Diego de Giráldez apresenta
varias composiçoes de subtil concepçao, polarizando, a vitalidade das coisas e
dos seres, trespassada de memórias seculares, por isso mesmo ligada ao
tradicionalismo do mundo rural...
Os trabalhos de Giráldez convidam o
espectador à reflexao. O pendor quase mítico da sua pintura transparece nas
bolas de cristal evidenciando o espaço e o vazio como uma interrogativa
carregada de significados... As suas cores possuem variaçoes timbricas e
envolvimentos de uma plasticidade etérea.
O transito singular para uma pintura
fiel a realidade exterior, mas carregada de interioridade, representa o
substrato " referencial" que assinala a corporalidade enigmática, com
carisma e dimençao adequada as realidades de nosso tempo, onde o regresso
indispensável à ecologia das coisas e dos seres e a ponte que nos afasta da
angustia exaltante que é o turbilhâo computorizado e complexo da vida
urbana...”.
José González Ortiz (Escritor,
Crítico de arte, Miembro de la AECA y AICA y Director del Museo de
Ciudad Real):
Surge un gallo entre el viento,
y Diego de Giráldez lo atrapa con su
pincel.
Con él, crea un espacio plástico,
un poema lírico, donde levitan las
burbujas
y se corporean los espíritus de las
cosas
que antes se desvanecían
en las intermitencias de su memoria.
El gallo invita a otros gallos,
a las mazorcas de maíz,
a los peces, a un perro, un cristo...,
para que todos conformen y generen
un cosmos dentro del lienzo.
¡Quizás, un cuento! En el que Diego
narra su
historia,
el sueño que palpita nervioso en la
punta de
sus dedos.
Diego materializa en el aire
los gallos que le arrullan en sus
noches,
a las palomas que se embriagan con el
arco iris,
a los seres queridos que pueblan los
latidos de
su corazón
la magia de sus pinturas
siembran de sugerencias el paso breve de
la vida,
y adornan de colores e imágenes,
el análisis, a veces frío y seco de la
razón.
PEDRO ARDÁ LUBEIRA (Diputación de
Pontevedra).
La obra Diego de Giráldez, ya
ampliamente conocida y comentada en todo el mundo artístico gallego, español e
internacionalmente, no deja de darnos cada día nuevas impresiones y por
supuesto nuevas satisfacciones. Al impresionante dominio del dibujo se le une
su gran invención, la aportación de un nuevo estilo al mundo del arte, el
Realismo NAS que es para mí una conjugación perfecta de tres elementos que nos
da una nueva visión del Arte.
César José Mera Rodriguez. (Senador y Alcalde
de A Cañiza, Pontevedra): “En la Villa de A Cañiza, flanqueada por
los montes del Paradanta y del Pedroso, nace el pintor Diego de Giráldez, desde
aquí ha recorrido gran número de ciudades de varios países, de los distintos
continentes, en los que, como sabemos, es reconocido al tiempo que está
representado en más de un centenar de museos de todo el mundo. En su andadura
profesional y personal siempre ha llevado el nombre de A Cañiza, Vigo,
Pontevedra y Galicia, por el mundo, algo que agradecemos profundamente.
Además quiero aprovechar esta
oportunidad para expresar mi satisfacción personal, así como la de mis
convecinos, por compartir esta hermosa Villa con un artista de cualidades tan
excepcionales, un artista que alcanzó hace ya tiempo un merecido lugar dentro
de la pintura contemporánea española”.
JOSÉ MANUEL BARROS. (Vicepresidente
de la Excma. Diputación de Pontevedra y Alcalde de Porriño): “DIEGO
DE GIRALDEZ. Sus obras, a las que dedicó sus mejores años han conseguido la
pureza, la brillantez, la delicada sensualidad y la sensibilidad del mensaje
con lo que logra despertarnos de los sentimientos más profundos, y que son
motivos sobrados para colmar la realización personal y profesional del artista,
así como para satisfacer las apetencias de quién quiera ser feliz poseedor de
una buena pintura.
Diego de Giráldez, vive para el arte y
triunfa con el Realismo " NAS ", conjugar el naturalismo, la
abstracción y el surrealismo no es tarea fácil, sin embargo Diego lo logra con
una perfección que deja atónitos a los estudiosos, profesionales y críticos de
arte.
La obra de Diego de Giráldez, desde mi
modesta condición de admirador de las Bellas Artes y más concretamente de la
pintura, en sus más de 300 exposiciones individuales con las que ha recorrido
todo el mundo, despierta en el espectador una sensación de atracción hacia sus
cuadros. Contemplando cuidadosamente la calidad atractiva, se aprecian
sensaciones que van más allá de estar admirando una obra pictórica. Algo que lo
ha consolidado y encumbrado como un gran maestro del arte contemporáneo”.
PALAIS BEAUMONT. FRANCIA: (INTERVENCIÓN DEL PINTOR DIEGO DE GIRÁLDEZ): "Mon art veut être de
l´art, surtout et avant tout.
Les sensations, les situations, les
images que je traite démontrent la valeur des objets.
Les qualités, la plasticité, un certain
symbolisme aussi, une réalité parfois fabulatrice. Le Réalisme NAS".
Colmena. “EL MUNDO DE LOS
MISTERIOS DE DIEGO DE GIRÁLDEZ -REALISMO POÉTICO. Naturaleza viva y muerta
utilizada con intenciones surrealistas, un universo personal y fascinante con
la poesía como trasfondo temático, componen las creaciones que el pintor Diego
de Giráldez. La obra de este artista merece capítulo a parte en la pintura
española contemporánea dentro del llamado realismo poético. Una tendencia
intimista y onírica de la realidad en la que la falta de luz del entorno de las
escenas contrasta con la luminosidad de los objetos e imágenes que conforman la
obra”.
Avelino Antón. “LA PINTURA
INTELECTUAL DE DIEGO DE GIRÁLDEZ EN GUADALAJARA. Significativa muestra de
la obra pictórica del artista Diego de Giráldez, de gran originalidad y estilo.
Su estilo denominado "Realismo
NAS" - naturaleza, abstracción y surrealismo -. Su temática general se
divide en rural, intelectual y religiosa, pero en ésta exposición predomina la
rural, con títulos afines: "Cabeza de gallo ", "Flor del peral
", " las Manzanas", " Membrillo", "Equilibrio de
la naturaleza en su retorcimiento", "Frutas ", etc. inspiradas
en plena naturaleza y que define su apasionamiento por la misma.
La obra de Diego de Giráldez, es muy
conocida a niveles de toda España e internacionalmente, pues esta representado
en más de 140 museos de diversos países, incluso uno en el municipio de su
villa natal. Así mismo está representado en numerosos museos de Portugal y
resto del mundo.
En la exposición de Guadalajara, se
puede captar esa sorprendente técnica mixta que utiliza en sus obras llenas de
simbolismo y misterio, pero siempre sugerentes de belleza y armonía”.
Antonio Montero (Gestor Cultural y Presidente de la
Fundación WFF): “Diego de Giraldez, es un artista consumado, es un clásico de la pintura
y la escultura que brilla con luz propia.
Cuando uno comienza a ver su obra colgada en los principales Museos
Nacionales y Extranjeros, el interés va en aumento, la obra de Diego permanece
majestuosa.
Diego es un pintor excelente digno de un
país que se precie de la Marca Galicia.
Yo recuerdo sus primeras exposiciones
donde me declaré manifiesto seguidor de su obra. Diego de Giráldez tiene y
tendrá su propia escuela. La creación del movimiento N.A.S, el color y el dominio
de la técnica que solamente se logra con horas de dedicación y maestría en el
manejo de los pinceles y en la preparación de los pigmentos y óleos, junto con
el trabajo, la constancia y la seguridad en si mismo, cuando se ha nacido artista”.
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